El Foro Internacional
de Turismo de Benidorm de este año (de 2014) va de los llamados “Destinos Turísticos Inteligentes”
(DIT’s) una posibilidad aplicada de las Smart Cities.
Bueno, el Foro ha pasado a ser bianual (en 2014 toca) y así
se prepara más y mejor, dicen,… y se implica a más gente. Hay novedades. Ahora
entra también, en el Concurso de Ideas Pedro Zaragoza Orts,
la profesionalidad en un apartado específico que acude a la Universidad a
través del programa INVAT.TUR Emprende.
De las Smart Cities ya dejé una pincelada
en junio de 2013, al respecto de la “chorrada” que en ese campo iba a aplicar
el Ayuntamiento de Benidorm (¿?).
En el INVAT.TUR, el 21 de febrero, el profesor Josep Ivars Baidal (Instituto Universitario de Investigaciones
Turísticas, UA), y enmarcado en el Foro’2014, vino a contarnos cómo estaba
esto del concepto “Smart City” y la acepción DIT’s
(Destinos Turísticos Inteligentes).
Fundamental, dijo Ivars, esto de sumarse al concepto Smart
City es “el análisis de experiencias”; es que hay muchos experimentos
aún en marcha y esto no pasa de “paradigma
asentado”. Es que lo de las Smart Cities es un “concepto
que ha hecho fortuna” y está etiquetado por ahí desde los años 90 (EE.UU.)… aunque no fue hasta 2007 cuando la UE realizó un trabajo de análisis y planificación, que es
referencia. Y luego está el Plan Nacional e Integral de Turismo de Gobierno de
España (PNIT 2012-15) que lo tienene
en cuenta y contempló el Proyecto deDestinos Turísticos Inteligentes, a través de SEGITUR.
Vamos que, para saber si estamos en la órbita Smart
City es cuestión de hacérnoslo ver: hay 74 indicadores (algunos con importante componente retórica, digo
yo) y 31 factores calve. Se trata de
un concepto totalizador y si Ud. (su ciudad) los cumple… pues… es una Smart
City. ¡Bravo! Luego, para el caso DIT hay
incluso un Subcomité de Destinos Turísticos que revisa la radiografía que
Ud. se hace y le concede la medallita del SC-DIT.
No es sólo un concepto para “nuevas” ciudades, explicó
Ivars; “las ciudades ya consolidadas pueden desarrollar el concepto por barrios”,
no en balde se trata de una concepción de “economía urbana”: autosuficiencia de
las células urbanas.
Para la Comunitat
Valenciana hay “un modelo DTI” propio
que se basa en la voluntad de evolución que demuestre la ciudad candidata a
partir de su diseño urbano, la gobernanza (la Ley de
Transparencia lo pone más fácil), un enfoque operativo de la sostenibilidad
(desde el punto de vista de la eficacia), una excelente conectividad
“para crear una economía digital”, una “sensorización” (de saber
utilizar los “sensores” y como “sensor” hay una buena retahíla de ellos) total
que mejore la gestión de la ciudad, la lógica orientación “hacia
la inteligencia de servicios”, el consabido protagonismo de la innovación
y, aplicar -y cuanto antes, mejor que mejor- la e-Administration. ¡Casi
ná, Josep! Por cierto -y sin acritud-, es lo mismo decir e-Administration que “oficina
sin papeles”; y esto lo entendemos todos.
El profesor Ivars nos metió en el Ciclo Hype de la Tecnología
y en los grandes proyectos que hay dando vueltas por el mundo para darnos el
mazazo de que, tras una encuesta, en la Comunitat Valenciana “no se
utilizan muchos aspectos tecnológicos en las ciudades”; lo más, “el
marketing en redes sociales, algunas apps en móviles, unos pocos códigos QR y,
todo lo más, áreas de wi-fi libre”.
Claro, a la vista de la realidad se diseñó un Plan
Director con 3 propuestas para Smart Cities: para ciudades (medias y
grandes), para municipios turísticos de importancia (no mentemos la bicha…) y
para municipios pequeños con “un enfoque supramunicipal del proyecto”.
Hombre, como base de trabajo no está mal. Falta, obviamente,
un liderazgo claro para acometer el proceso. Puede que llegue a salir del
consenso con los agentes sociales, pero… No sé yo, con la que está cayendo,
viendo cómo está el parque. Para Ivars, “hace falta un Smart Office que asuma la
coordinación, incluso el liderazgo”, a modo de una ADL actual (pero
avanzada) “que contemple un plan para su integración en red y una ejecución
monitorizada del mismo”.
Ivars señaló que a día de hoy “el problema no es tecnológico”.
Tecnología hay a porrillo y mucha de low cost; pero “disponer de tecnología no nos
convierte ni en Smart City ni en DIT si no cambiamos la mentalidad y la cultura
empresarial”.
Tengo debilidad por el trabajo del profesor Josep Ivars; un tipo genial, un
profesional inconmensurable -siempre varios pasos por delante- y un amigo. Pero
eso de cambiar mentalidades y culturas… Claro, “esto no se hace de la noche a la
mañana”, le dijo a la concurrencia.
Y terminó con lo de siempre: “se necesita tiempo, estrategias,
planificación, recursos humanos y recursos tecnológicos”. Vale Josep
que “es
la evolución natural”, pero cuán caro y largo me lo fiáis.
Y eso que yo estoy por la labor; pero no veo en Benidorm
líder que lidere, caudillo que acaudille, director que dirija, capitán que
capitanee o guía que guíe ésta -más que interesante- movida. En ocho meses, en
el Foro Internacional de Turismo de
Benidorm, lo vemos.
Bueno, por esta mañana lo dejo.
Me subo al INVAT.TUR que hoy se presenta el Barómetro de Redes Sociales y Destinos
Turísticos de la Comunitat Valenciana -el 2º; que el 1º ya se publicó el
año pasado. Compararemos- y hasta nos van a mostrar el perfil del “viajero social en
España”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario