Bueno, ya hemos terminado el curso 2012-3 en Los
Cafés de Meliá. Es que somos como niños y a la temporada de tertulias
le llamamos “curso”… y cada curso lo
comenzamos en septiembre -paramos por Navidad-Año Nuevo, Semana Santa, Fiestas
Patronales y fiestas de guardar que caigan en viernes- y lo finalizamos de cara
al verano, ya en julio. Semos asín…
Con la Tertulia 138
finiquitamos el 4º curso y, como mandan los cánones académicos vigentes,… ¡nos
han aprobado a todos!; ¡pasamos de curso!, al 5º… que comenzaremos a mediados
de septiembre. Pasamos “limpios”, sin asignaturas pendientes. Los “profes”, ¡¡molan!!; nos aprueban
siempre. Menos mal que no ha sido la Selectividad; hubieran aprobado el 98% y,
por lo menos, habría suspendido un contertulio. ¡Qué chasco! Y, no vean; hasta
tenemos un becario: José Tomas. Le ponen galletitas sin gluten. Y un “enchufao”: Mario, con el café va una
tónica. En fin, que semos asín…
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| Alberto Maiso Fdez. de Bobadilla Foto: Mario Ayús |
Sin desmerecer a ninguno de los 35 tertulianos anteriores de
este curso, hemos cerrado con traca: Alberto
Maiso Fernández de Bobadilla (Doctor Ingeniero Industrial -por la U. de
Zaragoza- y Enólogo -por la U. de Burdeos-, quien desde 1976 lleva metido en cuestiones
de dirección (técnica y general) del vino
de Rioja, desde Unión Vitivinícola (Bodegas
Marqués de Cáceres) a Bodegas López-Agos y Cía (Marqués del Puerto)… y así hasta 12 bodegas más, y miembro de los
comités de Cata y Calificación del Consejo Regulador de la DOC Rioja.
Este curso cafetero nos ha dado por el vino; lo que son las cosas. Y el caso es que comenzamos con Rafael
Poveda (17.10.2012), seguimos con la Cofradía del Queso Manchego
y sus maridajes vitivinícolas (19.03.2013¸y no nos la dieron con queso), Nacho
Coterón (de El Sumiller; 14.06.2013) y Alberto Maiso. Nos faltó Pedro
Nuño, premio literario gastronómico (incluso de cosas del vino), al que
un duro episodio familiar (que a buen seguro saldrá bien) le impidió estar con
nosotros; pero lo hará… el próximo curso. Con lo que aprovecho para señalar que
abrimos el plazo de matrícula… y a ver si le pegamos a la cebada (agua de
cebada -hordeata/horchata-, cervezas, güisquis y similares…).
Y bueno, a la lección magistral de fin de curso que dictó Alberto Maiso. Por cierto: lo de las
lecciones magistrales siempre eran por cosas del inicio del curso o por actos
académico interesante y glamuroso. Aquí la hemos dejado para final de curso.
Lamenté haber intentado hacer pellas… pero como la cabra
siempre tira al monte y el saber no ocupa lugar entre las neuronas (sí en las
estanterías) pues… me reincorporé tras la primera media hora. Pido disculpas al
tertuliano y a los contertulios, pero andaba liado.
Alberto
Maiso repasó la uva y la vinificación: variedades, suelos,
climas, prácticas culturales, detalles de jardinería de la vid, controles de
maduración, vendimias, transportes, recepción en bodega, muestras de acidez,
grado alcohólico, madurez fenólica, despalillado, estrujado, encubado,
maceración, fermentaciones (alcohólica primero, más tarde maloláctica),
descube, clarificación, filtración, estabilización, vino joven, crianza en
barrica, crianza en botella, embotellado, corchos… hasta hablamos de cavas y
orujos. Mira, parecía que había vuelto a las viejas aulas de la EUITA de
Orihuela (y al bar del Tío Pepe) y a aquella asignatura de Industrias (I y II;
entonces éramos así de poco originales. No como ahora que, en Geografía, existe
una asignatura que se llama “Compartimentación
Territorial de África”… cuando en el milenio anterior se llamaba “África”, a secas… y sin ritmo de
bubucelas). Más feliz que en brazos pasé la última clase magistral del “Los
Cafés del Meliá”.
Alberto
Maiso es un volcán de conocimientos vitivinícolas en constante
erupción y allí, en la sobremesa del Meliá
Benidorm, los fue volcando todos; desparramando conocimientos, anécdotas de
Pasteur, chismes de enólogos, detalles de maderas y botánica del género quercus, clase de química y grupos
Carbono, chaptalización (… cosas del francés Chaptal, allá por el XVIII y que
no es otra cosa que añadir azúcar al vino; palabro
que llevaba sin oírlo décadas), detalles de la uva Graciano, fallos de algunos
arquitectos, estructuras que hacen factibles los ingenieros, afianzamiento del
enoturismo, alguna salida de pata de banco de políticos “de principios de la
Democracia”, y algún apunte de buenos caldos. ¡La leche!; y la cosa iba de
vinos.
Coincidimos en lo del vino y la variabilidad climática, y en
lo de los Grandes Pagos de España: Ni tanto, ni tan calvo. Y, sobre todo, en
que “el buen vino” es el que le gusta al sujeto de la cuestión… ya que “todo
en el vino es muy subjetivo”.
Y dicho esto, yo, insisto en que sigo sin entender que se
comercialicen vinos blancos… sin dejarlos llegar a las fases de cava o brandy,
pero…”hay gente pa tó”. Es más,
coincido con el amigo Roc en lo del vino “interesante” que te puedes tomar en
casa, entre los 6 y los 10 €/botella, y que quintuplica el precio al llegar a
la carta del restaurante… por lo que soy más de cerveza. Pero estas son mis
cuitas…
A Alberto Maiso
lo tendremos de “profe” el próximo curso (el 5º); aviso. Vendrá tras la
vendimia, creo que con los posibles fríos de enero, a explicarnos cómo se hace
una cata… y como se cata un vino.
Mientras Alberto no traiga blancos….
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