26 jul 2022

OTRA MÁS DE LA TASA TURÍSTICA QUE ES UN IMPUESTO

  

Hoy, por Santa Ana (26 de Julio), otra más de la tasa turística y del que yo considero definitivo informe, al respecto de su idoneidad; de la Universidad de Alicante.

En este blog, la Tasa Turística -que es un impuesto-, la hemos tratado de todas las formas posibles; la última vez, en septiembre de 2017 ([I] y [II]), confiando en que no habría nueva oportunidad. Pero -¡mira!- hay quien se empeña en sacarla a pasear cuando no debe; principalmente por confundir churras[1] con merinas[2].

Y aquí, ya, una reflexión. Ambos dos especímenes -churras y merinas- pertenecen a la amplia familia Bovidae (mamíferos artiodáctilos), pero ambos son género ovis; ovinos a fin de cuentas y más allá de la subespecie doméstica ovis orientalis, poco o nada. Churras y merinas: las dos son ovejas, pero -¡Ojo!- no sirven para lo mismo. Retengan este aspecto, por favor.

Y hablando de ovis y ante la reflexión me asoma desde el subconsciente lo que debe ser un trauma -espero que menor- de mi niñez: lo de aquel/aquella/aquelle protagonista de la canción infantil que tenía tres ovejas, tres, en una cabaña. Y una le daba leche, la otra le daba lana y la tercera, que nunca lo entendí, ¡le daba mantequilla para toda la semana!… pero ¿la mantequilla no se obtiene a partir de la leche?; ¿va a resultar que la tercera, también de raza ‘láctea’ como la primera, es como que ‘más mejor[3]’? Otra versión dice que la tercera en discordia ‘me mantiene toda la semana’, lo que viene a sugerirme que en pasar la semana… ¿me quedo sin oveja porque me la he comido? Las canciones infantiles llegan a nivel crueldad gore.

Pues en eso estoy. Que seguimos sin entender -urbi el orbi[4]- que la familia Turismo tiene varios géneros y cada uno opera en su segmento y tiene sus singularidades y sus adeptos. Que esa es otra: aquí confundimos el tocino con la velocidad, el culo con las témporas, la gimnasia con la magnesia y creemos que todo el monte es orégano y, en él, todo es turismo y turístico. Y la verdad es que no.

Pero a lo que íbamos con el impuesto a la pernoctación en alojamiento reglado que amenaza a la Comunidad Valencina; lo de la tasa que es un impuesto.

Bastaría con comenzar a leer la página 8 del estudio de la UA sobre la cuestión. Y ya queda claro: “La tasa turística es una figura tributaria consolidada en muchas ciudades a nivel internacional, con la característica común, en general, de tratarse de ciudades con gran atractivo cultural, histórico, arquitectónico, etc.”

Y poco más que hablar ya. A partir del capítulo ‘ciudad’ con los aditivos de gran atractivo cultural, histórico, arquitectónico… paisajístico… aunque, como dijo Francesc Colomer, aquí lo que hay es “aportación de conocimiento” y que el estudio “no es un dogma de fe”. Teníamos, dijo (hablando de su departamento), “el deber de aportar solvencia académica a un debate”; y así lo ha hecho este informe. La clave está en entender lo de “atractivos únicos e irrepetibles” en ciudad. ¡Acotando, oiga!

Desde la UA, el equipo del Instituto Universitario de Investigaciones Turísticas -integrado por Armando Ortuño Padilla, Mª Reyes González Ramírez, José Luis Gascó Gascó, Jairo Casares Blanco y Francisco Monllor Fuster- ha sido capaz de resumir en su trabajo “La Tasa Turística: un Análisis sobre su Idoneidad en la Comunitat Valenciana” la situación y hacer un DAFO[5] sobre la no idoneidad de su aplicación. Y el análisis resulta de-mo-le-dor: contraproducente, contradictoria e injusta. Resulta ser, en palabras del profesor Ortuño, “un impuesto a un determinado modelo turístico” centrado en el alojativo hotelero y regulado. ¡En toda la yema, oiga!

El estudio del IUIT de la UA ha analizado las variantes -tasa turística por pernoctación, la tasa turística aérea, la tasa turística para los visitantes que no pernocten (Barcelona, cruceros)- y han llegado hasta la Proposición de Ley de Medidas Fiscales para Impulsar el Turismo Sostenible (proyecto de tasa turística en la Comunitat Valenciana, registrada en Les Corts Valencianes el 11.04.2022, que abre un abanico tan grande sobre el destino de la recaudado por el tributo que -sostienen los cinco investigadores del IUIT de la UA- “caben interpretaciones que desvirtúen el impuesto”, con lo que “se modificaría la esencia misma del impuesto, que es el argumento más fuerte a favor de la tasa” (final de la página 10).

Aquí hay un riesgo latente: generar la idea de que para atender servicios se ha de crear un impuesto específico extra.

El informe es más prolijo en exposición y argumentos, llegando a clarificar la situación de su implantación ‘a lo largo y ancho de este mundo’, frase que suena a historieta del capitán Tan[6], pero que es verdad porque hace un excelente repaso que nos lleva, por ejemplo, desde los 25 céntimos al euro por persona y noche en función del establecimiento y lugar de Croacia, hasta los 14 dólares de la ESTA[7] para los EE.UU., más lo que te claven in situ según ciudad y territorio yanqui.

Sí, CASI-CASI, en todos los sitios hay que apoquinar… y el domingo 24 de julio va Toni Mayor, presidente de HOSBEC, y en el Diario Información, se descuelga con que que “el turista lo acepta todo”[8]; y paga. Sí, eso es verdad: cuando algo quieres, lo pagas. Pero no se trata de eso ahora porque, ahora y siempre, tal como está dispuesto el impuesto, perjudica doblemente a los habitantes de la Comunitat Valenciana como receptores turísticos y como turistas en la propia Comunitat. Hablamos de una muy discutible equidad ya que deja a muchos territorios y formulaciones turísticas en mejores condiciones de competir que el alojamiento regulado

Aquí el tema está en la competitividad. Por eso Mayor, en la misma entrevista a la que me refiero señala lo del “sobrecoste al turista” y el momento actual “con tantas variables negativas que tenemos sobre la mesa”, arrancándose con lo de “un político prudente no lo tocaría ahora” -¿los hay por el cap i casal[9]?- y entonces deja caer lo de que cuando “pasen dos o tres años y haya estabilidad…” para decir que entonces “se podría -condicional- estudiar con más detenimiento”… que es decir que para entonces tampoco, salvo -y de ahí venía la referencia previa la ESTA de los EE.UU.- de que “tendría que ser una tasa del Estado” y lo justifica con que, entonces, “todas las autonomías tuvieran la misma presión”. Y está muy clara la postura de HOSBEC: ‘o Toddy o nada’[10]; o todos, o ninguno.

Más clara, y de siempre, la postura del Ayuntamiento de Benidorm: “No y nunca”[11]. La vengo oyendo desde que en los 90 del XX se habló de aplicarla en París y ya se dijo por aquí que nones[12].

No ha mucho, en esta undécima[13] Administración municipal, el pleno del ayuntamiento de Benidorm aprobó por unanimidad instar al Consell "a no implantar" la tasa turística "por sus efectos desfavorables para el turismo y por la férrea oposición a la misma del sector”[14]. Y así entramos en 2022 con el “STOP tasa” como la señal más habitual del sector turístico, con el alcalde de Benidorm, Toni Pérez, denunciado, por activa y por pasiva, que aquí hay un tic ideológico[15] y que esto es un show[16].  El propio alcalde, Toni Pérez, se manifestaba hace nada: “una imposición política; un impuesto que nadie ha pedido”[17]; incluso denunciaba ante el Palau de Benicarló[18] que rompía una realidad histórica: “el consenso del municipalismo en la Federación Valenciana de Municipios y Provincias”[19]; la secretaría técnica de la comisión de Turismo ha desarrollado un informe en el que se proponía el rechazo de la aplicación de la tasa.

Y hablando de informes, desde Turisme de la Generalitat, el secretario autonómico Francesc Colomer encargó uno a la Universidad de Alicante, este análisis que hoy aquí nos trae y, tras conocerlo, se posicionaba: “Nunca aplicaré la tasa turística y no me quedaré para verlo”[20]. Basta sentir de verdad lo que es y representa el turismo -sí, sí, ovis- para saber lo que es el de Sol y Playa y ya solo con eso, posicionarse en contra; y así lo han hecho alcaldes de todos los colores[21]… Y Colomer fue alcalde de Benicàssim[22] antes que secretario autonómico y sabe de qué va esto del turismo y del municipio turístico.

Y contra la tasa turística/impuesto a la pernoctación reglada en la Comunitat Valenciana hasta se han manifestado las Cámara de Comercio de Alicante[23] y Orihuela[24], el Instituto de Estudios Económicos de la provincia de Alicante (INECA)[25], la Asociación Valenciana de Empresarios[26]… estamos ante un grito empresarial unánime[27] y reiterado[28] que encuentra eco en partidos como el Popular cuyos líderes regional y nacional -Mazón[29] y Feijóo[30]- ya se han postulado. Incluso Feijóo ha planteado propuestas[31] más allá del tema.

Pero los hay empecinados, erre que erre[32], sin importar el efecto sobre la demanda.

El análisis de la UA no ha gustado a quienes confunden ovis -ovis orientalis aries con ovis orientalis aries- por no llamarlas churras y merinas y mirarles las ubres y el vellón[33], pero seguro que no saben lo que son. Y así nos va. Aquellos insisten en lo bueno que es este impuesto[34] y hasta le señalan el camino de salida al Secretario autonómico Colomer[35], que sabe de esto mucho más y que debe aguantar. Pero, Francesc, a palabras necias, trompetilla de Eustaquio en estado patológico.

La Cátedra de Nueva Transición Verde en la Universitat de València parece que ha elaborado un informe sobre la tasa turística que no localizo en su web[36], como tampoco los autores del estudio de la UA; y lo dijeron en el acto de presentación de su estudio en el Invattur. Yo solo encuentro allí reseñas de una reflexión de enero de 2020 al respecto de la implantación, y de mayo de 2022 diciendo que han realizado un informe y que están a favor, aunque es el Diario Información el que matizaba que el dictamen ‘valenciano’ viene a ser “partidario de su regulación en la UE, pasada la pandemia”[37]. Vamos, que de momento no.

Y esto ya va siendo una constante.

 

 

 

Pero yo voy al no y nunca. En la página 23 del estudio ‘alicantino’ arranca el análisis de la coyuntura turística de la Comunitat entre 2018 y 2021 y a las claras nos lleva hasta el impacto económico de la tasa desde la 25 del siguiente tenor literal: “… podríamos hacer el siguiente razonamiento: en 2019, 12,8 millones de viajeros se han alojado en hoteles, apartamentos reglados, campings y alojamiento rural de la Comunitat Valenciana, con 49,7 millones de pernoctaciones (Generalitat Valenciana, 2019), 29,7 millones pernoctaciones hoteleras y 19,9 millones extra hoteleras, con una estancia media en torno a 4 días. Si consideramos limitada la tasa, de forma similar a gran parte de los destinos que la tienen implantada, a un máximo de 7 días y excluimos a menores de edad (en torno al 30 % de los viajeros), y cobramos 1,5 € de media por persona y noche, la recaudación estaría en torno a 49,7 x 70% = 34,79 millones de pernoctaciones sometidas a tasa, por lo que 34,79 millones pernoctaciones x 1,5 € = 52,19 M€. Por su parte, los 1,5 euros por turista de cruceros que nos visite y que en total no superarán el millón de personas, podrían aportar hasta 1,5 M€, que se sumarían a los 52,19 millones de la tasa por pernoctación hasta alcanzar la cifra de 53,69 M€ si se cobrase en toda la Comunitat. Esta cantidad, 53,69 M€, no parece razonable si se pone en el más mínimo riesgo en estos momentos a un sector que es el mayor soporte e impulsor de la economía de la Comunitat Valenciana, cuando, como veremos a continuación, existen alternativas mucho más eficientes tanto desde un planteamiento de apoyo al sector como desde las posibilidades de recaudación fiscal pretendidas (en 2019, último año “normal”, el sector turístico aportó en impuestos en la Comunitat Valenciana un total de 3.849 M€ y más de 300.000 empleos...”.

El análisis de la UA llega hasta el momento de oportunidad y el escenario macroeconómico tendencial y la afección a las tarifas del sector turísticos, comparativa, conclusiones… 127 páginas para aprender y disfrutar donde lo que sí que queda claro es que “el dinero en el bolsillo del turista es más eficaz en el municipio turístico en cuestión -gasto- que en la recaudación de la Administración -impuesto-”.

Y todo esto sin querer personalizar en Benidorm; que esa es otra.

 

 


 

 

 


[1] Churra: raza ovina originaria de Castilla y León. Se trata de una de las razas autóctonas más importantes de España, por su alta especialización lechera. Es una de las razas más primitivas de la península ibérica, proveniente de Ovis aries celticus y da nombre al tronco churro (Churro significa "labriego" o "labrador").  Su lana es abierta y basta, muy adecuada para la fabricación de colchones.​ Su gran aptitud lechera hace que el principal uso de la raza sea la producción de leche.

[2] Merina: raza ovina de origen aún incierto vinculada al Sur Mediterráneo de la península ibérica o norte ribereño africano: antes de la dominación romana ya existía la raza. Es la raza más apreciada por todo el mundo para la producción de lana y la raza que ha dado origen a la mayoría de las razas cárnicas actuales. A principios del XVIII la nueva dinastía Borbón usó las ovejas merinas de la misma manera que la República Popular China usa los pandas: regalándolas a otros gobernantes para cerrar acuerdos políticos y para mostrar buena voluntad y amistad. Y así se introdujeron en Francia, Suecia, Sajonia, Hungría y Prusia y su crianza se extendió por Europa y América. En el XIX el Reino Unido la expandió por sus colonias. En la actualidad la mayor parte de las cabezas se concentran en Estados Unidos, Argentina, Sudáfrica, Nueva Zelanda y, sobre todo, Australia (148 millones de cabezas). Su expansión ha generado variedades; cabe destacar la Rambouillet (Merina de Rambouillet), la Negretti, la merina americana, la Vermont, la Delaine y la merina australiana.

[3] Término absolutamente incorrecto pero que viene al pelo por lo absurdo de tener que tratar este tema de hoy, el impuesto turístico a la pernoctación, cuando hay especímenes de la raza humana que no saben distinguir entre turismo de sol y playa y turismo cultural, urbano, etc.

[4] Con el sentido de ‘a los cuatro vientos, a todas partes

[5] Herramienta de estudio de la situación analizando sus características internas y su situación externa en una matriz cuadrada.

[6] Personaje, como Locomotoro, Valentina, el Tío Aquiles y los Hermanos Malasombra del programa infantil Los Chiripitifláuticos de TVE entre 1968 y 1974. Con su inseparable salacot de explorador y su camiseta a rayas, el actor Félix Casas siempre que encontraba la ocasión para contar sus viajes con su reiterativa frase: "En mis viajes por todo lo largo y ancho de este mundo". Cosa de oírles a los pequeños de la casa por ser un Baby boomer.

[7] Un ESTA (Electronic System for Travel Authorization, o Sistema Electrónico de Autorización de Viaje) es un permiso de viaje obligatorio para poder viajar a EE.UU. sin visado. No es un visado y tampoco puede sustituirlo.

[9] Expresión que se viene utilizando para la ciudad de Valencia desde tiempos de Jaime I. Sintácticamente significa “cabeza y casa” para referirse a la ‘ciudad más importante’ o, también, máxima autoridad.

[10] Lema publicitario del chocolate vitaminado Toddy, un preparado en polvo de chocolate y maltas para aditar a leche, patentada en 1919 por James William Rudhard en Búfalo (NY), tras pasar por Camp Merrit, lugar de concentración de tropas norteamericanas para ser trasladadas a Europa durante la IGM, y descubrir los preparados instantáneos.  En 1928, uno de sus empleados, el portorriqueño Pedro Erasmo Santiago se hizo cargo de la concesión para Latinoamérica (Brasil, Colombia y Venezuela). Tras la IIGM PepsiCo controló la compañía y se introdujo en México, Argentina, Portugal y España (años 50). En 2001 PepsiCo adquirió definitivamente la marca.

[12] Negar repetidamente algo, o para decir que no, e insistir con pertinacia en este dictamen.

[13] La primera administración municipal surgió de las elecciones del 3 de abril de 1979; desde entonces se han sucedido otras diez administraciones a partir de los comicios celebrados los días 8 de mayo de 983, 10 de junio de 1987, 26 de mayo de 1991, 28 de mayo de 1995, 13 de junio de 1999, 25 de mayo de 2003, 27 de mayo de 2007, 22 de mayo de 2011, 24 de mayo de 2015 y 26 de mayo de 2019. La próxima cita, para la duodécima Administración municipal, tendrá lugar el 28 de mayo de 2023.

[18] Sede de Les Cortes valencianes. Con historial vinculado a grandes familias de la nobleza valenciana (Borgia, Benavente, Osuna y Benicarló), la familia Pujals instaló en él una fábrica de seda y fue sede del Gobierno de la República en Valencia hasta ser desde les Corts desde el 17 de noviembre de 1994.

[22] 1991-1995, 2003-2004 y 2007-2011

[32] Reiteración, insistencia y terquedad. Para aprender a pronunciar bien la erre se requiere mucha paciencia, infinitas repeticiones y un cierto grado de terquedad. De ahí viene la expresión erre que erre, que ya manifiesta Quevedo en su Cuento de cuentos. Carta, de 17 de marzo de 1626: “Se está erre a erre todo el día”.

[33] Conjunto de lana que se le quita a una oveja o a un carnero al esquilarlo.

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