26 jun 2022

¿40 EN LA OTAN?; SI VAMOS PARA 70...

  

Lo de España y la OTAN tiene argumento para película de Hollywood. Mejor hacerla allí; que, si la hacen en la vieja piel de toro, islas y plazas de soberanía seguro que la empañan, como han hecho con la última de Elcano. ¡Dios, qué país!

Esta de hoy es una historia que, mal que les pese, comienza en 1953... pero que casi nadie quiere ver fue así.

Comencemos con Carlos Arias Navarro[1], presidente del Gobierno en el año 1974.

Resulta que, en abril de 1974, se produce en Portugal el triunfo de la Revolución de los Claveles[2] y el consiguiente debilitamiento -por irrupción comunista- del flanco sur de la OTAN. Los capitanes de abril, como así se les llamó a los oficiales intermedios que protagonizaron la revuelta, muy en sintonía con la izquierda, consiguieron su objetivo, aunque cuando sonó Paulo Carvalho[3] no las tuvieran todas consigo.

La OTAN estaba muy preocupada por la influencia de Álvaro Cunhal[4], del Partido Comunista portugués, en todo el proceso y el giro de izquierdas que tomaba Portugal, por lo que España, muy especialmente para los norteamericanos, se les hacía más necesaria. Y hasta sabían -hay un memorándum de la CIA sobre una entrevista de Santiago Carrillo[5] con un periodista del Times- que aquí no se producirían aventuras del tipo 25A portugués. Santiago Carrillo, secretario general del PCE, con tal de entrar en un gobierno de concentración, había declarado por activa y por pasiva que no pediría la retirada de las bases norteamericanas, a las que llega a comparar “con la presencia de los rusos en Checoslovaquia”[6] [7].

Tal era el pavor yanki a un Portugal de Izquierdas y en la OTAN (desde la fundación: 4 de abril de 1949) que el presidente Gerald Ford se nos vino de visita en mayo de 1975 para ver, desde España y en España, cómo podía conseguir doblegar posturas contrarias al ingreso de España. Hasta el embajador Wells Stabler se puso manos a la obra con todo el que políticamente se movía para conseguir un compromiso y que el Consejo de la Alianza Atlántica bendijera la entrada de España por la puerta grande y no por la de servicio como estaba ocurriendo, recuerdo, desde 1953. Pero ni con los esfuerzos de Ford y de Stabler el Consejo aceptó a España como nuevo miembro oficial a finales de aquel mes de mayo; Reino Unido, Dinamarca, Holanda y Noruega insistían en que No es NO. Y que mientras estuviera Franco, NO y NO. Y eso que España estaba -a través de los acuerdos de 1953 con los norteamericanos- hasta las cejas en lo de la OTAN: estábamos en el Sistema de Defensa de Occidente, mal que les pese a muchos.

Franco se muere un 20N de 1975 y a finales de enero de 1976 el mismísimo Carlos Arias –“Españoles, franco ha muerto”- ya dejó caer que seguíamos negociando la entrada: él mismo había firmado el día 24 de enero el tratado de cooperación militar con los Estados Unidos y debatido el tema, que volvió a tratarse el 12 de marzo con la revisión del Tratado España-EE.UU.

Escribo del Arias Navarro sucesor en el puesto de Carrero Blanco, el del “espíritu del 12 de febrero” (de 1974); el Arias que no las tenía todas consigo. Por Madrid corría el rumor -documentado- de que había sido severamente amonestado por un Franco moribundo, que le despachó con cajas destempladas[8] cuando le animó a que delegara poder tras su tercer infarto, durante el mes de octubre de 1975. Estaba incómodo con la situación; el bunker le miraba con resquemor y los nuevos políticos le consideraban como un dinosaurio fuera de juego, con lo que él veía enemigos por todas partes. No obstante, a piñón fijo con lo de la OTAN y en su “nuevo” programa de gobierno post Franco, en enero de 1976, planteaba para España un “Estado unitario y fuerte” para meter la cabeza de facto en la OTAN a ver si así se le tenía más en cuenta. Pero representaba lo más rancio del franquismo y ni la OTAN ni la Comunidad Europea iban a dialogar con él. El 1º de julio de 1976, animado por todos, presentaba su dimisión al Rey, quien nombraba presidente de su segundo gobierno a Adolfo Suárez[9] con la misión de desmontar las estructuras franquistas y dejar que Torcuato Fernández-Miranda[10] sacara adelante el Proyecto de Reforma Política a ver si cuajaban ambas cosas.

Suárez merecería un capítulo aparte; aunque aquí y ahora dejaremos alguna pincelada. En marzo de 1980 nos hizo un viaje relámpago a Washington y se entrevistó con el presidente Jimmy Carter, quien le animó a integrase de facto en la OTAN; la URSS había invadido Afganistán, que en ocasiones se nos olvidan los detallitos, y desde allí querían la gran base que es la península ibérica con marchamo OTAN.

Suárez y Carter, debió ser por la asquerosa mantequilla de cacahuete, chocaron desde el primer momento y el presidente español se puso en plan borde respecto al tema. En junio Carter vino a Madrid y Suárez se negó a hablar de la OTAN; de ella habló con el Rey y con Felipe González.

Marcelino Oreja, que fue uno de los ministros de Exteriores de Suárez, en los Encuentros de Yuste sobre la Transición (2013), señaló los dos errores de aquel presidente español: Israel y la OTAN. Por cierto: Oreja era tan firme defensor de la entrada en la OTAN que Suárez le cesó en septiembre de 1980.

Pocos días después de cesar a Oreja, Suárez presentó una Moción de Confianza… y la ganó; pero desde dentro de la propia UCD comenzaron a cavar bajo sus pies y la desestabilización llegó por parte de los democristianos de Miguel Herrero, dando entrada en la escena política al concepto de “barones del partido”, que desde entonces no nos ha abandonado. El 29 de enero de 1981, hundido por la situación, Adolfo Suárez dimitía como Presidente del Gobierno, por televisión, dejando sin resolver lo de la OTAN, donde seguíamos metidos hasta las trancas.

Otro ministro de Suarez, Otero Novas -de Presidencia-, reveló que al poco de llegar al cargo le llamó el embajador ruso en Madrid, Serguei Bogomolov, y le pidió que trasladara a Suárez un mensaje de Moscú: la entrada de España en la OTAN haría peligrar la paz mundial. Aquello, dicen, conmocionó a Suárez.

Y por otro lado estaba en el tablero de operaciones patrio los casos de terrorismo interno y la escalada de violencia -pues llevaba añitos dando la tabarra- del Movimiento para la Independencia y Autodeterminación de las Islas Canarias, MPAIAC[11]; Otero dice también que los americanos le plantearon que “OTAN sí, o apoyaban a los ‘indepes’ de Cubillo”, que buena es la CIA para estropear las cosas. Respecto a esto, resulta que mientras que de lo de Oreja hay documentación a ambos lados del Atlántico, de lo de Otero, sólo lo que él cuenta.

El MPAIAC de Antonio Cubillo[12] tenía su facción armada: las Fuerzas Armadas Guanches -instruidas en La Guaira venezolana- que hacían de las suyas en las islas, pero en mayo del 78 colocaron una bomba en Galerías Preciados de Madrid y fueron de gatillo fácil contra agentes policiales en la península, amén de algún atraco para financiarse. Se dice que Suárez no estaba por tener en escena al mismo tiempo a ETA, GRAPO, Terra Lluire y dos docenas más de grupos -hasta 50 constata Fernández Soldevilla[13]- como el MPAIAC y se puso duro en represión; y lo de los canarios, me insisten, no se lo perdonó a los americanos.

Buena excusa para esa animadversión, pero no tengo más información, ni la he conseguido buceando en la Internet este largo fin de semana de San Juan donde el tiempo en el AVE se pasa volando mientras intentas confirmar datos, fechas y temas. Lo único que tengo de los Estados Unidos sobre acciones en las Islas Canarias es un memorándum del Departamento de Marina de los Estados Unidos, de 1896, que el historiador Amós Farrujia Coello sacó a la luz -en 2014- en la Revista de Historia Canaria y en el que se plantea “el desplazamiento simultáneo de las escuadras destacadas en el Mediterráneo y Asia para conquistar las islas Canarias”, que en 1996 el presidente de la Escuela Naval de Guerra estadounidense, Henry Clay Taylor, calificaba de “temeridad” -operar a tantas millas de sus costas- y entendió que no fuera llevada a cabo.

Por cierto, los indepes canarios del MPAIAC de Cubillo están en el origen del accidente aéreo de Los Rodeos (27.03.1997). Ese día hicieron estallar una bomba en la floristería del Aeropuerto de Las Palmas de Gran Canaria[14] y ante la amenaza de un segundo explosivo se cerró el aeropuerto y se desviaron los vuelos al resto de aeropuertos isleños. A Los Rodeos llegaron los Boeing 747 de Pan Am, en escala transoceánica, y de KLM que luego chocarían dejando 583 muertos; la mayor tragedia de la aviación española. Cubillo sostenía que Canarias estaba en Estado de Guerra contra el turismo[15]. Otro alumbrado más. 

Este país produje unos engendros…

Pero volvamos a la OTAN. Tuvo que ser Leopoldo Calvo-Sotelo en 1981, el que lo dijera y fuera verdad; porque en mayo de 1982 -40 años ya- España entraría ‘oficialmente’ en la OTAN. Suárez no era nada partidario; Calvo-Sotelo, el de la triste figura -aún hay quien sostiene que una vez sonrió-, lo consiguió.

Hay cosas de este país -y de los que más mandan- que, de verdad, es para hacérnoslas mirar; por especialistas, claro.

Es que, con Suárez, no salgo de mi asombro. Estando vinculados a la OTAN vía Estados Unidos -como dije e insisto- desde 1953, va como presidente del Gobierno de España y se me planta en 1978 en La Habana -primer jefe de Gobierno europeo que realizó una visita oficial a la Cuba de Castro- y, además de otras cosas que ni vienen a cuento ni a la Historia, confirma la presencia de España en la sexta Cumbre del Movimiento de los No Alineados[16], también en La Habana. Si es que nos pasa poco con lo que nuestra clase política hace.

Claro que, en aquellos días, cuando cantábamos aquello de “en el cielo manda Dios, en la tierra los cristianos y en esta España de Franco mandan los americanos” -ripio que venía de los tiempos de Maura[17], don Antonio, y su forma de hacer política, pero adaptado a las circunstancias de los sesenta del siglo XX-, sólo un 18% de españoles estábamos por la OTAN.

Llegados aquí sí que me gustaría dar un toque a lo del Movimiento de los No Alineados (MNA) que tiene su aquel, pues estaban muy escorados a la izquierda, como el cardumen aquel de atunes… pero eso es otra historia. Desde Bandung[18], estaban entregados a la URSS. Díganme si era visible, o no, el pie del que cojeaban los organizadores de estas cumbres no alineadas: Belgrado (1961), El Cairo (1964), Lusaka (1970), Argel (1973) y Colombo (Sri Lanka, ex Ceilán; 1976) donde habíamos conocido la historia de Sirimavo Bandaranaike; y luego, la de La Habana.

Por cierto, Bandaranaike fue la primera mujer primer ministro del planeta; antes que Indira Gandhi, Golda Meir, Margaret Thatcher o María de Lourdes (Ruivo da Silva de Matos Pintasilgo, que era el nombre completo), la efímera primer ministro de Portugal entre el 1º de agosto de 1979 y el 3 de enero de 1980.

La Señora B. -de Bandaranaike, como así la llamaban los occidentales- estuvo en el cargo, en tres etapas, 17 años y 7 meses; y en el mandato intermedio le pilló ser anfitriona de la quinta cumbre y estar en la prensa internacional (occidental, obviamente) por su política antiimperialista, acusadamente izquierdistas y ceder bases a los rusos. ¿Pero no eran los no alineados?; sería la de los No Alineados con los Estados Unidos.

A los no alineados (MNA) se les vio siempre la patita. Y aun así, a la cumbre de La Habana mandó presencia activa Adolfo Suarez, el mismo que no quería reconocer al Estado de Israel; el mismo que se abrazó con Arafat (septiembre de 1979; primera vez que el líder palestino consigue ser recibido por un jefe de Gobierno occidental); el mismo que se fue a los funerales de Josip Broz “Tito” (mayo de 1980; dicen que fue el funeral de Estado más grande de la Historia[19]), y se permitió lamentar[20] la ausencia del presidente de los Estados Unidos, Jimmy Carter.  El mismo, oiga.

Si quieren justificación, sepan que el auge del neutralismo y la irrupción del pacifismo, así como la no percepción del problema que supone el comunismo y suponía el Pacto de Varsovia, hacía que los españoles de los ochenta no estuvieran muy a favor de entrar en la OTAN. Unos, los del bunker, porque veían que estar en la Alianza implicaba apostar por la democracia; otros, socialistas y comunistas, porque se identificaba con el imperialismo soviético.

Encima, en enero de 1981, como dijimos, Suárez presenta su dimisión y el 23F se produce el intento de golpe de Estado, que fue un buen detonante para sentarse a negociar de facto lo que de iure era una realidad. El 25 de febrero de 1981, dos días después, se inicia el proceso de ingreso de España en la OTAN a partir del discurso de investidura de Leopoldo Calvo-Sotelo. El 30 de mayo de 1982 España se convierte en el miembro número dieciséis de la Organización del Atlántico Norte. El eje Baleares-Estrecho-Canarias será la pieza clave del proceso.

Pero el PSOE de entonces no estaba por la labor y en 1982 nos salió con lo de OTAN de entrada no, que ya hemos contado en este blog, y hasta con un decálogo sobre política de paz y seguridad que en el Debate sobre el Estado de la Nación -de finales de octubre de 1984- va Felipe González y dice -punto primero- que se declara la continuidad de España en la OTAN. Vamos, el parto de los Montes. Estábamos desde 1953 e íbamos a seguir.

Luego, en su decálogo, González se perdía en banalidades tipo reducción de la presencia norteamericana en España, el no integrarnos en la estructura militar y en pedir la entrada en el Comité de Desarme de la ONU, muy de la formula militar Señorita Pepis que han seguido Zapatero y Sánchez.

“Seguiremos en la OTAN”, dijo González; y hasta prometió un referéndum… que tuvo que esperar a marzo de 1986 por miedo a perderlo. Aún así, el 12 de marzo, la participación no llegó al 60% y ganó el sí con el 52’5%, llegando casi al 40% el voto del no. El voto en blanco fue del 6’5%. Con este resultado, España confirmó su permanencia en la OTAN y Felipe González salvó su Gobierno a partir de “una pregunta trampa y una fuerte manipulación de TVE, la única existente, durante la campaña electoral[21].

Y en el 88 Felipe González, con un par, renovó los acuerdos de 1953, donde a consecuencia de ellos -como dije, insisto y repito- estábamos integrados en el sistema de defensa de Occidente. Ah, en 1995, Javier Solana, socialista español, llegó a Secretario General de la OTAN. Y no pasó nada; el Noveno Secretario General de la OTAN que coordinó el proceso de formulación de políticas de la organización y desplegó la fuerza multinacional (IFOR) en Bosnia para hacer cumplir los aspectos militares del Acuerdo de Paz de Dayton. Con un par.

A Javier Solana se le atribuye la reorganización de la estructura política y militar de la OTAN y la reforma de sus estrategias básicas, y el liderazgo de la ampliación de la Alianza para incluir a la República Checa, Hungría y Polonia. Fue el negociador de la organización del Acta Fundacional entre la OTAN y Rusia; acta que definió los objetivos y el mecanismo de consulta, cooperación y toma conjunta de decisiones que constituiría el núcleo de las relaciones entre la OTAN y Rusia. Un trabajo sensacional.

Pero ahora Rusia está dando por saco… Y de martes a jueves de esta misma semana tenemos la reunión de la OTAN, 25 años después de la anterior que acogimos en España. Para celebrar el 40 Aniversario de nuestra incorporación (oficial), pues estamos, disculpen que insista tanto, desde 1953… con lo que ya deberíamos ir pensando en celebrar el 70 Aniversario en 2023.

 

 



[1] Carlos Arias Navarro (1908-1989) presidente del Gobierno durante la dictadura franquista y la Transición. Licenciado en Derecho, ejerció como notario y fiscal. Tuvo un destacado papel en la represión que se produjo en Málaga en 1937. Fue gobernador civil de León, Tenerife y Navarra, así como director general de Seguridad (1957-1965), alcalde de Madrid (1965-1973), ministro de la Gobernación (1973), último presidente del Gobierno bajo el régimen franquista -tras la interinidad de Torcuato Fernández-Miranda por la muerte de Carrero Blanco- y primero de la monarquía de Juan Carlos I. Arias fue acusado de haber tolerado terrorismo de Estado por los sucesos de Montejurra (1976). Dimitió el 1 de julio de 1976

[2] Movimiento popular-militar pacifico que estalla en revolución y derroca el régimen dictatorial en Portugal y su dominación colonial en África. Se materializó el 25 de abril de 1974 provocando el fin del régimen de la Segunda República portuguesa, que no convocaba elecciones democráticas desde 1925.​ El fin de esta Dictadura, conocido como Estado Nuevo, restauró la democracia en Portugal casi cincuenta años después, y permitió que todas las provincias portuguesas no europeas (excepto Madeira, Azores y Macao) lograran su independencia antes de concluir 1975. Tras una época violenta en los territorios que hoy son Guinea Bisáu, Cabo Verde, Angola y Mozambique, Portugal concedió la independencia a los cuatro países y se convirtió en un Estado democrático y de derecho. Principalmente en Lisboa, la gente colocó claveles en las bocachas de las armas de los soldados.

[3] La canción E depois do Adeus de Paulo de Carvalho, que había representado a Portugal en el Festival de Eurovisión unos días antes, emitida a las 22:55 horas del 24 de abril, fue la llamada a la subversión. Grândola, Vila Morena, la canción revolucionaria de José Alfonso, prohibida por el régimen​, fue la segunda señal pactada; sonó a las A las 00:25 horas del 25 de abril.

[4] Álvaro Barreirinhas Cunhal (1913-2005) secretario general del Partido Comunista Portugués entre 1961 y 1992. Cunhal vivió exiliado en Francia y la Unión Soviética, regresando a Portugal tras la Revolución de los Claveles de 1974, donde dirigió el PCP participando en todos los gobiernos provisionales como Ministro sin Cartera, hasta la caída en 1976 de Vasco Gonçalves. Sus postulados, tanto en el gobierno como en el Partido, podrían resumirse en un enérgico antifascismo y un sentido leninista de la disciplina, muy alejado el eurocomunismo de Enrico Berlinguer del PCI, Santiago Carrillo del PCE y Georges Marchais del PCF.

[5] Santiago José Carrillo Solares1 (1915-2012); político y periodista español, secretario general del Partido Comunista de España (PCE) desde 1960 hasta 1982 y una de las figuras clave en el comunismo español desde la Segunda República hasta el final de la Transición. Combatió en la guerra civil española, en la que el episodio más controvertido fue su grado de responsabilidad en las matanzas de Paracuellos, y fue una figura relevante de la oposición al franquismo y de la Transición española, llegando a ser diputado en Cortes Generales durante nueve años (de 1977 a 1986)

[8] Viejo dicho militar. Cuando se echaba de alguna unidad a un soldado u oficial y se destensaban los cordajes de los tambores -las cajas- para que los redobles sonaran desafinados; destemplados.

[9] Adolfo Suárez González (1932-2014), político y abogado español, presidente del Gobierno de España entre 1976 y 1981. Desempeñó varios cargos públicos durante la dictadura franquista: fue gobernador civil de Segovia, procurador en Cortes y director general de Radiodifusión y Televisión. A pesar de ser un desconocido para la opinión pública en el momento,3​ fue nombrado presidente del Gobierno por el rey Juan Carlos I en 1976. Fue una de las figuras clave de la Transición española. Durante su presidencia se llevaron a cabo diversas medidas, como la autoliquidación de las Cortes franquistas o la legalización de los partidos políticos; fue especialmente notoria la legalización del Partido Comunista. Fue elegido presidente de la coalición Unión de Centro Democrático (UCD) en las elecciones generales de 1977, convirtiéndose en el primer presidente del gobierno. En 1981 presentó su dimisión como presidente del Gobierno por el desmantelamiento de la UCD. Tras su dimisión, creó junto a otros dirigentes de UCD el partido Centro Democrático y Social (CDS) y fue elegido diputado en Cortes en varias elecciones generales, hasta que abandonó la política en 1991. Se retiró de la vida pública desde 2003 por haber sido diagnosticado con enfermedad de Alzheimer. Falleció en 2014 a causa de una enfermedad pulmonar obstructiva crónica

[10] Torcuato Fernández-Miranda y Hevia (1915​–1980); político y jurista español, conocido por su papel durante los últimos años de la dictadura franquista y por haber sido profesor de Derecho Político del rey Juan Carlos I. Está considerado como un estratega del proceso de transición a la democracia en España,​4​ y uno de sus tres artífices, junto a Juan Carlos I y Adolfo Suárez.

[11] El Movimiento por la Autodeterminación e Independencia del Archipiélago Canario (MPAIAC) fue una organización terrorista independentista, fundada en 1964 por Antonio Cubillo, cuyo fin fue la secesión de Canarias de España. Durante la década de 1970 operó a través de dos grupos armados: las Fuerzas Armadas Guanches (FAG) y los Destacamentos Armados Canarios (DAC), causando directamente un muerto, e indirectamente 583 muertos y 61 heridos.​ Mantuvo excelentes relaciones con otros grupos terroristas, principalmente el GRAPO, que le proporcionó armamento y explosivos, y con gobiernos árabes, como Libia y Argelia, que le proporcionaron financiación.​ En el año 1979 la organización renunció al terrorismo y expulsó a Cubillo, su fundador y hasta entonces secretario general

[12] Antonio de León Cubillo Ferreira (1930-2012); abogado, profesor y político español y terrorista, fundador del Movimiento por la Autodeterminación e Independencia del Archipiélago Canario (MPAIAC). En 1978 sufrió un intento de asesinato en Argel que la Audiencia Nacional consideró había sido encargado por personas no identificadas “pero sí pertenecientes a los servicios policiales”. Es el creador de la bandera tricolor con siete estrellas verdes como bandera de la “lucha por la independencia y el socialismo para Canarias”. Llegó a conseguir el apoyo de la extinta Organización de la Unidad Africana, dirigido por Argelia,​ que en una reunión secreta declaró a las islas como geográficamente africanas en 1968. Del atentado de 1978 Cubillo sobrevivió, y quedó con una discapacidad motora permanente, por lo que necesitó de muletas para andar. Para entonces, los gobiernos de Marruecos y Mauritania le habían retirado ya su apoyo y sólo mantenía los de Argelia, Libia, Benín, Guinea Ecuatorial, Tanzania y Zambia.​ Pretendía el apoyo argelino para presentarse en la ONU y explicar lo que él consideraba “el problema colonial canario”. En 1979 el MPAIAC abandona la lucha armada. Un sector del MPAIAC expulsa a Cubillo quien, en agosto de 1985, ya sin apoyos internacionales, regresa a Canarias desde su exilio en Argel, después de pactar con el gobierno de Felipe González su regreso, jurando la Constitución española,​ y funda el Congreso Nacional de Canarias (CNC), partido político del que será principal dirigente y cabeza visible. El CNC será un partido minoritario, teniendo tan sólo cierta presencia destacable en la isla de Lanzarote. En 2003 la Audiencia Nacional condenó al Ministerio del Interior a pagar una indemnización de 150.000 euros a Antonio Cubillo por el atentado que éste sufrió en 1978. En 2012, poco antes de su muerte, anunció su intención de sabotear la Vuelta a España como hizo en 1988.

[13] Gaizka Fernández Soldevilla 'De ETA al Daesh'; Editorial Cátedra

[16] El Movimiento de Países No Alineados es una agrupación de Estados conformada durante la Guerra Fría, el conflicto geopolítico e ideológico mundial de la segunda mitad del siglo XX que se manifestó con el enfrentamiento indirecto entre la Unión Soviética y los Estados Unidos. La finalidad del MPNA era conservar su posición neutral y no aliarse a ninguna de las superpotencias. La organización continúa vigente, pero sin relevancia práctica.

[17] Antonio Maura y Montaner (1853-1925); político español, presidente del Consejo de Ministros en cinco ocasiones durante el reinado de Alfonso XIII; ingresó en el Partido Conservador, pero perteneció a la facción gamacista del Partido Liberal.

[18] La conferencia de Bandung (1955) fue una reunión de Estados asiáticos y africanos, la mayoría de los cuales acababan de acceder a la independencia. Fue organizada por los grandes líderes independentistas: Gamal Abdel Nasser, presidente de Egipto Jawaharlal Nehru, de India, y Sukarno, jefe de Estado de Indonesia... además de los líderes de Pakistán, Birmania y Ceilán. Estos últimos cinco países asiáticos invitaron a otros veinticinco a participar en la conferencia. Se celebró entre el 18 de abril y el 24 de abril de 1955 en Bandung, Indonesia, con el objetivo de favorecer la cooperación económica y cultural afroasiática, en oposición al colonialismo y el neocolonialismo de las antiguas metrópolis y los Estados Unidos, así como a su inclusión dentro del área de influencia exclusiva de la Unión Soviética.

[19] 4 reyes, 31 presidentes, 1 vicepresidente, 6 príncipes, 22 primeros ministros y 47 ministros de asuntos exteriores

14 jun 2022

DE LA CIUDAD (CASI) SIN COCHES...

   

La ciudad no es para mí”, cuentan que hace poco le ha dicho Rayo McQueen a Herbie, cuando Jim Douglas o Maggie Peyton -según la versión-, se bajaron del Volkswagen a saludar a Sally Carrera, que les observaba…

Emm... No está mal como entradilla, pero no es manera de comenzar este post. Así es que, empezaremos de nuevo y mucho más serios…

Érase que se era… el año1933…

Y un 12 de junio -hizo antes de ayer, pues, 79 años y esto lo escribí entonces- se inauguraba una reunión en Londres -capital del mundo civilizado- de las gordas-gordas, donde delegaciones de 66 países se enfrascaron en resolver la difícil papeleta que había dejado el Crack de 29[1] que nos había metido en la Gran Depresión[2]. Aquello se prolongó hasta el 27 de julio y se le llamó -y se le llama- Conferencia Internacional Económica y Monetaria. Los sesudos próceres -de diversas patrias- asistentes a la misma pretendía coordinar medidas de política económica para salvar al mundo de una tragedia económica que tiene los mismos tintes que la que nos ha endilgado Putin invadiendo y machacando Ucrania, implosionando la que teníamos encima.

Y en el Museo de Historia Natural -en Cromwell Road, South Kensington- que se citaron y en sus amplias salas que se me metieron los que más mandaban en esto de la economía. Llevábamos casi tres años de penurias y aquello iba de mal en peor. Luis Nicolau d’Olwer, un hombre que dominaba la lengua y la literatura pero que había sido ministro de Economía entre abril y diciembre de 1931, encabezó la delegación española a la ciudad del Támesis. Le acompañaba, menos mal, Antonio Flores de Lemus, un economista del positivismo que había colaborado tanto y tan bien con la dictadura de Primo de Rivera como con la Segunda República.

Y me voy a 1933 porque es un año, digamos, redondo para mis intereses en este post. Los primeros meses de 1933 son los de John Maynard Keynes con The means to prosperity[3] -concertación, concertación y concertación- y los de las 15 primeras medidas del New Deal[4] de Roosevelt, mientras nazis y comunistas lanzaban sus tentáculos: Mussolini miraba a África, Hitler lo militarizaba todo y Stalin, que lidiaba el holodomor[5] de Ucrania (y algún sitio más) -y que no quería que nadie hablara de la hambruna (entre 2’5 y 11 millones de muertos, según las fuentes-, veía en la Gran Depresión la tumba del capitalismo; y la jaleaba y la aplaudía, a pesar de que a él también le afectaba; y mucho.

El caso es que, a pesar de esta terrible situación en la introducción del Post de hoy, el mundo, como hoy -que igual estamos que estamos igual y con una guerra machacando Ucrania el heredero de aquellos de la URSS- giraba y giraba; gira y gira. Con permiso del Sr. Fontana: “gira, el mundo gira en el espacio sin fin”. Tal vez lo haga porque “el mundo nunca se ha parado ni un momento”, como cantaba Jimmy detrás de sus gafas de pasta.

Y en estas que me llego hasta los arquitectos del mundo mundial, en este contexto que les cuento de 1933, y tienen que lidiar con que Moscú, que se había ofrecido para la organización del Congreso Internacional de Arquitectura Moderna, laboratorio de ideas del Movimiento Moderno entre 1929 y 1959[6], les dice que en 1933 como que no. Vale que a punto de despuntar la década de los 30 estuvieran por todo aquello de las nuevas ciudades, pero la crisis les había hecho envainar las propuestas.

Los que sabían de urbanismo se apresuraban a decirnos que había que asumir que la arquitectura y el urbanismo habían cambiado con la llegada del maquinismo[7] y que era necesaria una nueva forma de concebir las ciudades, donde confluían las máquinas de todo tipo junto con la arquitectura y el urbanismo. Y pasamos de las tres funciones fundamentales del urbanismo -habitar, trabajar y disfrutar (el ocio)- a considerar ya los temas de desplazamiento y circulación; así pues, terminamos hablando de habitación, trabajo, esparcimiento y circulación como los 4 ejes sobre los que hacer ciudad.

Y ya 1933 con el IV CIAM en marcha la URSS les dice que Moscú no pude ser sede; no dice nada de la hambruna desencadenada, ni de la operación[8] que ocasionó el suceso de la isla de Nazino[9]; solo que no era momento ni ocasión. Aquello cayó como un jarro de Agua fría en el mundo de los arquitectos que se las prometían con la URSS después de la concepción de la arquitectura como nuevo Arte basado en la Técnica, del Concurso Internacional convocado para el Palacio de los Sóviets (1931), de la primera Reunión Internacional de Arquitectos (Moscú; q1932) y de la fundación de ASNOVA (Asociación de Nuevos Arquitectos, rusos; 1932); pero en 1933 Moscú no querían extranjeros por ningún rincón de la URSS; no estaba el horno para bollos.

Los arquitectos, entonces, encontraron una alternativa congresual en Atenas y -como allí tampoco el horno económico estaba para bollos de dispendio- se montaron medio congreso a bordo de un barco, el Patris II[10] -a modo de crucero iniciático, he leído por algún lado- que llevó al centenar largo de miembros del CIAM (alguno con acompañante) de Marsella a Atenas, Grecia -donde la civilización occidental se originó-; y a Marsella que les devolvió. De camarote en camarote, de cubierta en cubierta al sol del Mediterráneo, viajaron los arquitectos hasta poner pie a tierra en las aulas de la Escuela Politécnica de Atenas. De este IV CIAM sale la llamada Carta de Atenas[11]… que tiene su aquel, por cuándo y quien la escribió; que no fue un canto coral.

El 29 de julio de 1933, el vapor Patris II zarpó del puerto de Marsella con rumbo al puerto de El Pireo. En el pasaje, delegaciones de quince países; la griega -la decimosexta- se les uniría en la propia Atenas, aunque un barquito con algunos arquitectos helénicos acompañó al Patris II desde la misma bocana del puerto de El Pireo.

Y allí estuvieron Le Corbusier[12], Moholy-Nagy, Leger, Perriand, Van Eesteren, Pollini, Terragni, Syrkus, Giedion, Roth, Von der Mulill, Zarvos, Chareau… La delegación española estaba compuesta por Josep Lluís Sert, Josep Torres Calvé, Ricart Ribas Seva y Antoni Bonet Castellana; todos miembros del GATEPAC[13], sección Cataluña.

Se dijo que los espacios limitados del barco y el clima mediterráneo favorecerían el desarrollo de la actividad congresual; pero veremos que les brindó un puente de plata a la molicie.

En la tarde del 1 de agosto, tras casi 4 días de navegación, atracaban el Patris II; bajaban a tierra los congresistas y t se instalaban en el hotel Grande Bretagne, en el corazón de Atenas. Y de ahí a las sesiones de la Politécnica, con alguna excursión, entre el 5 y el 9 de agosto, a las islas Sarónicas (Salamina, es la más famosa), a las Cícladas (Mikonos, Santorini, etc.), al Peloponeso (tofo aquello más allá de istmo de Corinto) y a Delfos (que fue lugar del oráculo del templo de Apolo). El 10 de agosto el Patris II iniciaba singladura de regreso a Marsella y recomendó Le Corbusier a los congresistas hubieron de aprovechar el tiempo redactando las Actas de Congreso. El 14 atracaban a los pies de la Bonne Mère, Notre Dame de La Garde. De este barco debían salir las reflexiones finales del espacio habitable y sólo salieron los congresistas y… se quedaron en Marsella unos días más porque no habían concluido el trabajo. Y no lo concluyeron.

Al final, se marcharon a sus casas y las actas sin cerrar.

Hasta el mes de octubre no hay un documento alguno que cuente algo de lo tratado -y es a modo de resumen- de aquella cita congresual.

En 1942, José Luis Sert reinterpretará lo debatido y en la primavera de 1943, Le Corbusier publica Urbanisme des CIAM. La Charte d’Athènes… y ya tenemos la Carta de Atenas en la película. Dicen que Le Corbusier se apropió de lo tratado; pero es que nadie le había puesto el cascabel al gato. En 1957 repitió la jugada. Moraleja: no hagas un congreso en un crucero o consigue que redacten más rápido; que es de interés.

Lo que pasó en la travesía y estancia griega de aquel verano de 1933 se resume en que los embarcados y desembarcados querían hacer una llamada desesperada a los gobernantes para que entendieran que si la ciudad crecía incontroladamente estaríamos ante un gravísimo problema que entraba en lo social. Y, claro, tal como estaba el parque -recordemos, 1933- muchos se preguntaron si era el momento.

La IV CIAM, en ese ir y venir y de excursión por Grecia, trató sobre la construcción de viviendas y su higienización; se establecieron los parámetros de materiales, luz y ventilación en los diseños para favorecer la salud en las ciudades, que hasta entonces incluso apenas contaban con saneamientos de aguas sucias y redes de agua potable. Y se trató esto de la circulación y el tráfico en las ciudades: diseñar grandes arterias que atravesaran las ciudades y permitiesen un tráfico fluido… pero ¡lejos de las viviendas! Y, resulta que, una cosa es planificar y otra cosa es la cruda realidad y el bajar al ruedo. Las vías de circulación, se decía, soportarían distintas velocidades en función de su volumen. Y se fue a más: ¡fuera los pasos de peatones, fuera las aceras, fuera toda interacción posible entre vehículos y ciudadanos! Y así nos ha ido.

Yo creo que esto supuso un problema porque todos, en su fuero interno, sabían que las ciudades no iban, atendiendo a lo trabajado en el periplo Mediterráneo -que luego se llamó Carta de Atenas-, a partir de cero: tirarlo todo abajo y empezar racionalmente la construcción de la nueva ciudad como había hecho el barón Hausmann con aquel trozo de París. Y más, insisto, con la que estaba cayendo en 1933 y las previsiones que se hacían.

El caso es que lo fuimos dejando y dejando, y al final las ciudades fueron para los coches. El asfalto resulta que sostiene la vida de las ciudades y por él nos hemos movido con el vehículo automóvil como patrón de medida, lo que nos ha generado una serie de problemas que van desde la calidad del aire que respiramos al ruido de la circulación rodada, pasando por la congestión de tráfico (retrasos) y la necesidad de estacionar los vehículos, que esa es otra: según la base de datos de movilidad metropolitana de la Unión Internacional de Transporte Público, los coches de uso privado están aparcados y parados el 92,3 % del tiempo[14]; ¡menos mal! ¿Se imaginan todos los coches a la misma hora quemando rueda?

En fin, estilos de vida que reclaman soluciones. Y ahora gritamos que ¡el automóvil tiene que salir de la vía pública!

No es de hoy. En 1998 asociaciones nocionales e institutos de urbanistas de once[15] países de la UE dieron carta de naturaleza al Consejo Europeo de Urbanistas que redactaron la llamada Nueva Carta de Atenas centrada en el problema de las ciudades en su Medio Ambiente. Y en 2003 volvieron a escribir una Nueva Carta de Atenas donde el desarrollo se vuelve sostenible y la movilidad se contempla a través de conexiones rápidas, agradables, sostenibles y baratas entre los lugares de trabajo, vivienda, ocio y cultura. Se busca, desde 2003, una ciudad para todos, participativa y segura, saludable y productiva, innovadora, en la que se debe proporcionar a los ciudadanos más posibilidades para satisfacer sus necesidades de desplazamiento medioambientalmente sostenible, con elementos a favor de la cultura y una integración total con el entorno. Y diciéndole adiós al coche. Pero no es nada fácil; se trata de un cambio de paradigma que sólo se acelera por las bravas.

Y mientras esto se orquesta, hemos comenzado a sentir la marca de Zorro, la Z.

Han aparecido zetas como setas,por todos lados en la ciudad: ZBE/ZBEP (zona de bajas emisiones de partículas), ZCR (zona de circulación restringida), ZPA (zona de protección del aire), ZTL (zona de tráfico limitado)… lo mismo es la Z de zonificación que planificaron los arquitectos de 1933 llevada a otra dimensión y hemos pasado de separar las labores que desarrollan los ciudadanos a habilitar lugares donde sea más fácil vivir sin los problemas del tráfico rodado.

París ha declarado la guerra a los vehículos diésel viejos (anteriores a 2006). En el centro de París residen unas 150.000 personas y existen unos 300 hoteles, más de 2.000 restaurantes, 50.000 empresas, 40 museos… un sin Dios caótico de emisores y polución. Allí quieren que mejore la atmósfera que se respira y el ambiente que se escucha: accesos restringidos a muchísimos vehículos particulares, incluso autobuses turísticos. Las restricciones a la movilidad durante la pandemia precipitaron las medidas.

Hamburgo ha tomado el toro por los cuernos y ya trabaja para que en 2034 el automóvil esté erradicado en el 40% del territorio. Sólo se permitirá el transporte público y la bicicleta. Los alemanes, en esto, nos llevan delantera. Vauban era una base militar de la Alemania nazi, en Friburgo, que quedó abandonada en 1991. Y se pensó el levantar allí un eco-barrio de criterios medioambientales y sociales donde la circulación se llevaría a cabo en tranvía o en bicicleta (ahora también se contempla el patinete); el vehículo a motor de combustión no entra en Vauban salvo para cargar-descargar y los de emergencias. El 75% de sus residentes no tiene vehículo propio y funciona el car-sharing[16] para cuando se tiene que salir de Vauban.

Una ciudad (casi) sin vehículos con motores de combustión es posible; sólo hay que plantearse un cambio de paradigma en cuanto a la pareja accesibilidad/movilidad -que cogemos el coche antes que el paraguas, cuando llueve, o, sencillamente, para ir al estanco- y contar con un sistema de transporte público eficaz, ágil y racional.

Pontevedra lo hizo por las bravas y ahora presume de ser “el milagro mundial”. En El Español[17], en su edición del domingo 12 de junio, un artículo encumbra el proceder de la ciudad donde se prohibió, hace 19 años, la circulación de coches, el tráfico de vehículos, en el centro de la ciudad. Por allí sólo circulan ahora residentes con plaza de garaje, taxistas y vehículos de reparto. Y la peatonalización ha seguido avanzando. Si en 1999 los coches disponían de un 70% del espacio público y los peatones el resto, hoy, 2022, la cosa ha dado la vuelta: el 70% para quienes se desplazan a pie o en bici y el resto queda para los coches. Así, las emisiones de CO2 han caído un 70%, hasta media tonelada por persona y año, cuando el promedio en España anda por las 6,4 toneladas.

En 2014 Pontevedra recibió el premio ONU-Hábitat por su buena accesibilidad y movilidad. Suma trece premios más.

En todas las calles el conductor tiene 15 minutos para acceder; no se trata de que en la ciudad no circulen coches sino de que lo hagan de manera racional. Allí han acabado con eso de ir al estanco o bajar a la playa en coche. Y cuando llueve, sacan el paraguas y no el coche.

Pontevedra lo ha hecho. Con la Ley 7/2021 de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética, a más tardar, el 1 de enero de 2023 en España habrá casi 150 municipios con zonas de bajas emisiones[18] y eso de circulación 10-20-30; la propuesta Benidorm, ciudad amable; Concienciación 10, 20, 30 está en ello y estuvo en la última Semana Europea de la Movilidad, en el Auditorium Le Plaza de Bruselas, organizado por Eucities, ICLEI y Polis, con el apoyo de la Unión Europea demostrando que sin acogotados por los coches se puede ser una ciudad más amable para residir en ella y venir de vacaciones.

Desde la redacción del Plan de Movilidad Urbana Sostenible de Benidorm, en una clara apuesta por la seguridad vial y el fomento de la movilidad sostenible, se ha implantado en Benidorm la velocidad genérica de 20 km/h en la mayor parte de las vías del municipio, En las vías principales de acceso a la ciudad, con dos carriles por sentido, se ha limitado la velocidad a 30 km/h, mientras que en las zonas especialmente sensibles, como por ejemplo los entornos próximos a las entradas de los colegios, zonas deportivas, zonas peatonales con paso permitido a autorizados, etc., se ha limitado la velocidad a 10 km/h.

A este plan han seguido otros: Plan de Transporte Urbano Sostenible (2017), Plan Global de Seguridad Vial (2018), Plan de Estacionamiento Sostenible, Plan de Accesibilidad Universal (2018) y Plan Ciclista de Benidorm (2020).

Para concienciar a los conductores y hacer más visible su velocidad, se han construido un gran número de reductores de velocidad y se han instalado en puntos estratégicos de las vías principales 9 conjuntos de radares pedagógicos y cabina de radar convencional, que se pretenden seguir ampliando paulatinamente y hay aparcamientos disuasorios. Benidorm suma una treintena de parkings disuasorios diseminados por distintos puntos, que juntos alcanzan una capacidad que ronda las 5.000 plazas.

En fin, que vamos a que la ciudad no sea para él…

 



[1] El crack del 29, fue una la mayor crisis jamás conocida que estalló el 24 de octubre de 1929. En esta fecha la bolsa de valores de Wall Street sufrió una caída en sus precios. Esto provocó la ruina de muchos inversores, tanto grandes hombre de negocios como pequeños accionistas, el cierre de empresas y bancos.

[2] Gran crisis financiera mundial que se prolongó durante la década de 1930, en los años previos a la Segunda Guerra Mundial. Su duración depende de los países que se analicen, pero en la mayoría comenzó alrededor de 1929 y se extendió hasta finales de los años treinta. Fue la depresión más larga en el tiempo, de mayor profundidad y la que afectó a mayor número de países en el siglo XX. En el siglo XXI ha sido utilizada como paradigma de hasta qué punto se puede producir un grave deterioro de la economía a escala mundial. Se originó en Estados Unidos, a partir de la caída de la bolsa de valores de Nueva York el martes 29 de octubre de 1929 (conocido como crack del 29 o Martes Negro, aunque cinco días antes, el 24 de octubre, ya se había producido el Jueves Negro), y rápidamente se extendió a casi todos los países del mundo. La Gran Depresión tuvo efectos devastadores en casi todos los países, ricos y pobres, donde la inseguridad y la miseria se transmitieron como una epidemia, de modo que cayeron: la renta nacional, los ingresos fiscales, los beneficios empresariales y los precios. El comercio internacional descendió entre un 50% y un 66%. El desempleo en los Estados Unidos aumentó al 25%, y en algunos países alcanzó el 33%. Ciudades de todo el mundo se vieron gravemente afectadas, especialmente las que dependían de la industria pesada, y la industria de la construcción, que se detuvo prácticamente en muchas áreas. La agricultura y las zonas rurales sufrieron la caída de los precios de las cosechas, que alcanzó aproximadamente un 60%.​ Ante la caída de la demanda, las zonas dependientes de las industrias del sector primario, con pocas fuentes alternativas de empleo, fueron las más perjudicadas. Los países comenzaron a recuperarse progresivamente a mediados de la década de 1930, pero sus efectos negativos en muchas zonas duraron hasta el comienzo de la Segunda Guerra Mundial.

[3] El camino hacia la prosperidad

[4] New Deal (nuevo trato) es el nombre dado por el presidente de los Estados Unidos, Franklin D. Roosevelt a su política intervencionista puesta en marcha para luchar contra los efectos de la Gran Depresión en Estados Unidos. La iniciativa se desarrolló entre 1933 y 1938 con el objetivo de sostener a las capas más pobres de la población, reformar los mercados financieros y redinamizar una economía estadounidense. Una primera propuesta, los Cien Días de Roosevelt, se ejecutó en 1933 con una batería de medidas y leyes de reforma de los bancos, programas de asistencia social urgente, programas de ayuda para el trabajo, o incluso programas agrícolas. Se realizaron inversiones millonarias y se permitió el acceso a recursos financieros a través de las diversas agencias gubernamentales. Los resultados económicos fueron moderados. El Segundo New Deal se extendió entre los años 1935​ y 1938, poniendo por delante una nueva distribución de los recursos y del poder en una escala más amplia, con leyes sindicales de protección -Ley de Seguridad Social- y programas de ayuda para agricultores y trabajadores ambulantes. La Corte Suprema de los EE.UU. determinó inconstitucionales numerosas reformas legales, pero algunas partes de los programas fueron reemplazadas rápidamente. El segundo New Deal fue mucho más costoso que el primero, y aumentó el déficit público. El desempleo todavía alcanzaba a 11 millones de estadounidenses en 1938

[5] El Holodomor (literalmente: 'matar de hambre'), Genocidio ucraniano u Holocausto ucraniano es el nombre de la hambruna que devastó el territorio de la República Socialista Soviética de Ucrania, Kubán, Ucrania Amarilla y otras regiones de la URSS como Kazajistán, así como el Cáucaso Norte y la región del río Volga, en el contexto de la colectivización de la tierra emprendida por la URSS, durante los años de 1932-1933, en la cual habrían muerto de hambre entre 1,5 y 12 millones de persona. Los campesinos ucranianos pagaron el precio más alto: cuatro millones de vidas perdidas. Los nómadas kazajos fueron sedentarizados a la fuerza y privados de sus ganados. El historiador británico Robert Conquest estimó en su libro La cosecha del dolor: La colectivización soviética y la hambruna de terror que por lo menos unos once millones de campesinos habían muerto en el período 1932-33 (siete millones de ellos en Ucrania, dos millones en la región norte de la Transcaucasia y dos millones en otros territorios). Para el período extendido 1930-37, este autor estimó el número de campesinos muertos en once millones, con la muerte de otros tres millones y medio adicionales, en campos de trabajos forzados, después del último año citado. En otras palabras, habría implicado un total de catorce millones y medio de fallecidos (seis millones y medio debido a la deskulakización (contra los kulaks, campesinos con tierra), un millón por la catástrofe demográfica kazaja y siete millones durante la hambruna de 1932-1933).

[6] Con casi una década en blanco entre 1934 y 1946, tras su fundación en La Sarraz, Suiza, en 1928

[7] El maquinismo fue la introducción de maquinaria y sistematización a los procesos de fabricación para facilitar la elaboración de productos y reducir sus costos. Es un concepto histórico que hace contacto al fenómeno acontecido durante el final de la Revolución industrial, coincidiendo con la introducción masiva de maquinaria para sustituir o reducir el trabajo. Surgió en Inglaterra en el siglo XVII.

[8] Deportación forzada de los llamados ‘elementos obsoletos’, también conocidos como ‘elementos desclasados y socialmente dañinos’ y ‘colonos especiales

[9] En febrero de 1933 se propuso en la URSS el "plan grandioso" con el fin de reubicar hasta a 2.000.000 de personas en Siberia y Kazajistán en asentamientos especiales. Los deportados debían convertir cerca de un millón de hectáreas de baldío siberiano en terreno productivo, y convertirse en autosuficientes en dos años. Dicen que Stalin rechazó el plan en mayo de 1933 cuando ya estaba en marcha y eso fue peor para los primeros deportados. Se cuenta que la situación económica era tan mala que no podían proveerles de nada. A la isla de Nazino -conocida como Isla de la muerte e Isla de los caníbales- llegaron en mayo 6.144 colonos especiales soviéticos deportados, falleciendo 4.000 de ellos en los 3 meses siguientes, con prácticas de canibalismo. Sólo se les facilitaba un poco harina para alimentarse, alguna herramienta y unas pocas prendas de abrigo. En la isla no había construcción alguna que ofreciera un mínimo refugio.Habían sido transportados desde Moscú y Leningrado.

[10] Entre 1928 y 1935 el Patris II perteneció a la naviera National Steam Navigation Co Ltd de Grecia, con base en el puerto de El Pireo

[11] La Carta de Atenas apuesta por una separación funcional de los lugares de residencia, ocio y trabajo poniendo en entredicho el carácter y la densidad de la ciudad tradicional. En este tratado se propone la colocación de los edificios en amplias zonas verdes poco densas. Estos preceptos tuvieron una gran influencia en el desarrollo de las ciudades europeas tras la Segunda Guerra Mundial. Las conclusiones fundamentales de la vivienda fueron: a) La vivienda debe tener primacía sobre el resto de usos; b) la situación de la residencia se buscará la higiene; c) La relación vivienda/superficie la determinan las características del terreno en función del soleamiento; d) Se debe prohibir la disposición de viviendas a lo largo de vías de comunicación; y e) La solución son las viviendas en altura situadas a una distancia entre ellas que permite la construcción de grandes superficies verdes (tapiz verde).

[12] Charles-Édouard Jeanneret-Gris, más conocido como Le Corbusier (1887-1965);  arquitecto y teórico de la arquitectura, urbanista, pintor, escultor y hombre de letras suizo nacionalizado francés en 1930. Es considerado uno de los más claros exponentes de la arquitectura moderna (junto con Frank Lloyd Wright, Oscar Niemeyer, Walter Gropius, Alvar Aalto, Richard Neutra, Ludwig Mies van der Rohe y Theo van Doesburg) y uno de los arquitectos más influyentes del siglo XX.

[13] GATEPAC (1930-1936), Grupo de Arquitectos y Técnicos Españoles para el Progreso de la Arquitectura Contemporánea cuyo fin fue promover la arquitectura racionalista. Constituido como rama española del C.I.A.M. Publicaron la revista A. C. Documentos de Actividad Contemporánea, órgano de referencia para los movimientos modernos en la España de las décadas de 1950 y 60. Formaban parte del grupo los arquitectos Antoni Bonet, Ricardo de Churruca, Germán Rodríguez Arias, Sixt Illescas, Ricardo Ribas, Josep Lluís Sert, Manuel Subiño, Josep Torres Clavé, Joan Baptista Subirana, Ramón Aníbal Álvarez, Víctor Calvo, Santiago Esteban de la Mora, Fernando García Mercadal, Felipe López Delgado, Manuel Martínez Chumillas, Luis Vallejo, José Manuel Aizpúrua y Joaquín Labayen. Sert fue catedrático de Harvard.

[14] Un estudio de la Universidad de California en la Los Ángeles (UCLA) lo eleva al 95%; La Fundación Real Automóvil Club del Reino Unido sube al 96’5%. En España, según el informe 'Cuentas Ecológicas del Transporte' de Ecologistas en Acción de 2014, los coches están de media aparcados el 97 % del tiempo.

[15] Bélgica, Dinamarca, Alemania, Grecia, Francia, Irlanda, Italio, los Países Bajos, España, Portugal y el Reino Unido

[16] Sistema que posibilita alquilar un coche por periodos de tiempo limitados con vehículos repartidos por toda la ciudad para que los usuarios pueden utilizarlos haciendo el trayecto que deseen, dejándolos también en cualquier sitio, como si se tratase de un sistema de alquiler de bicicletas. Ahora mismo, Sharenow (Car2Go), Free2Move (Emov) y Zity son las plataformas de 'car sharing' de Barcelona y Madrid mejor valoradas por los usuarios, según una encuesta sobre movilidad elaborada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU)

[18] Se entiende por zona de baja emisión el ámbito delimitado por una Administración pública, en ejercicio de sus competencias, dentro de su territorio, de carácter continuo, y en el que se aplican restricciones de acceso, circulación y estacionamiento de vehículos para mejorar la calidad del aire y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero, conforme a la clasificación de los vehículos por su nivel de emisiones de acuerdo con lo establecido en el Reglamento General de Vehículos vigente.