18 abr 2023

DE VIVIENDAS SOCIALES, CASAS BARATAS… DEL PROBLEMA DE LA VIVIENDA… DESDE EL SIGLO XV SIN SUPERAR LA CUESTIÓN

  

Estábamos de paellita dominguera hortelana cuando Carlangas me saca el móvil, que le había pitado, y a voz en grito nos ladra lo de las 50.000 viviendas de la Sareb para alquileres asequibles[1] que ya desmadraron la cita gastronómica y más de uno anduvo, hasta llegar a los postres, como pollo sin cabeza justificando, descojonándose o criticando la iniciativa electoralista pronunciada en Valencia. Vamos a tener que hacer como en la Taula del Bon Profit[2]: no hablar ni de política, ni de religión.

Ya en el ritual de prevención de la malaria que extiende la sobremesa hasta que el sol se pone, gin tonic de Oxley viene, gin tonic de UnCut va, la cosa degeneró y más parecía aquella huerta una sesión de un parlamento cualquiera, con sus desplantes y todo. Temíme lo peor. El 77% en volumen de la Naked Gin ‘UnCut’ ayudó mucho a agriar la cosa, por muy cortito que fuera y mucha tónica que llevara el chisme. ‘Tal vez’ se sumaba a ello el índice etílico que los volvió tan locuaces: los tercios de Gulden Draak (10’5%) que habíamos arramblado del Lidl para pasar el arroz. Al final terminamos como amigos -ayer, algunos, con resaca-… pero, reconozcámoslo, hubo tensión. Y no estamos ya para eso.

Yo, raro en mí, opté por estar de oyente, disfrutar de mi cigarro y mis copas. El motivo no era otro que el no tener ni repajolera idea de que la Sareb tuviera tanto ladrillo; y el presumir claroscuros[3] en el tema, que ayer y hoy se han ido sabiendo[4]. Me pilló la tarde en un renuncio que posibilitó darle mecha a casi un nuncio: un cigarro San Cristóbal de la Habana, 20 Aniversario LCDH, del que sólo había oído hablar -y que hoy podría largar con propiedad organoléptica-, que me habían hecho llegar el bueno de Lucas el viernes último y que imaginaba -y ahora se- que costaba un cataplín. Tempus fugit.

Y ya en la tarde-noche del lunes, al llegar a casa, rumiándolo desde el café que estaba, di rienda suelta a esto de la vivienda social que en España siempre ha sido un problema -mejor o peor resuelto- y en la tarde-noche de este martes, dieciocho, remato.

Yo recuerdo a mi padre en el Patronato San Francisco de Asís de Alicante, con Pepe Hernández, el señor Lillo y el capitán Vargas, en aquellas oficinas de Reyes Católicos; y al padre Ángel, de Carcagente, con sus luengas barbas blancas, su hábito oscuro y su cruzada por crear uno de los barrios más populares de Alicante, Ciudad de Asís, para alojar a los ferroviarios, que entonces malvivían en condiciones hoy inasumibles -“durmiendo en el interior de viejos vagones” he llegado a leer-, a obreros portuarios o de la fábrica de aluminio, y a los inmigrantes manchegos que poco a poco iban llegando.

Ven: ahora mismo me falta mi padre -un mes y dos días ya- al que poder preguntar, pues él lo vivió en primera persona: la de escrituras que formalizaban.

El padre Ángel consiguió del Obispado, del Gobierno Civil, del Ministerio de la Vivienda y de la Caja Provincial de Ahorros el impulso para comenzar en 1953 a construir la Ciudad de Asís, entre baldíos en la parcela delimitada por el extinto cuartel militar de la Princesa y la vía ferroviaria, en Benalúa. A finales de los sesenta ya tenía Ciudad de Asís incluso un templo y nuevas dependencias para las oficinas del Patronato, que yo, de niño, también pisé.

Casas humildes y útiles”, que así se llamaban, también construyó el padre Ángel en Orihuela, Murcia o Carcaixent. Y la barriada alicantina Divina Pastora, leo por ahí.

Y he comenzado por este ejemplo para ilustrar lo de la vivienda social -el alojamiento de la clase obrera- como aquella vivienda que se alquila o vende a unos precios que no se rigen por los de mercado y que atienden a la capacidad económica de los beneficiarios. En el caso del alquiler, éste puede ser ofrecido tanto por empresas privadas como por el propio Estado. Y en España esto de la vivienda social, sea del cariz que fuere, siempre ha sido un mal endémico.

Me voy a retrotraer hasta los tiempos de arranque del feudalismo, en el siglo V, para iniciar el tema con el alojamiento de los siervos -es que esto era así-: era responsabilidad de los señores. Responsabilidad, sí; pero no obligación legal. Y por aquel entonces ni había interés por ello, ni por la calidad del alojamiento, ni por la higiene (que esto último es algo que la caída del Imperio Romano dejó en tinieblas en la vieja Europa).

Con el tiempo, la población comenzó a emigrar del campo a las ciudades en busca de seguridad física y quizás oportunidades. Y con ello, a generar el consiguiente problema que el tiempo iba matizando hasta el siglo XVII, por lo menos. Es entonces -y sirva como ejemplo de vivienda social- cuando en Madrid comienzan a proliferar las corralas, vivienda comunal surgida a partir del corral de comedias y que es la evolución de la casa castellana de patio interior, que ganó altura con el aumento demográfico.

Las corralas del XVII, del XVIII y del XX -incluso las de las primerías del XX- están idealizadas, pero eran terroríficas: sólo suponían de 20 a 45 metros cuadrados y sólo servían para hacinar familias; no tenían ni tienen nada de poético[5]. La novedad era el retrete comunal en el rellano de la escalera en cada planta.

La corrala -vivienda vecinal, casa de corredor- no sólo es madrileña; las hubo por toda España. Es mediterránea; de la península -España y Portugal- y de Italia. Hay investigadores que la expanden aún más en todas las riberas del Mare Nostrum.

Madrid y sus corralas es un caso de solución al problema de la vivienda social por aumento de población debido a la centralidad y la localización de la Corte. Pero la necesidad de vivienda social que nos ocupa llega con la explosión demográfica y la industrialización.

Por cierto, ya que llegamos a la cuestión demográfica voy y pregunto: la revolución demográfica, ¿fue causa o consecuencia de la Revolución Industrial?

Yo, que aún noto, casi cuarenta y ocho horas después, la fuerza del espléndido cigarro en mi boca -tal vez al enterarme de lo que pagó por él el amigo Lucas-, respondo -me sale el Pepito Grillo geógrafo que en ocasiones saco a pasear- que la revolución demográfica fue consecuencia de las transformaciones económicas primero y, luego, fue causa de las mismas.

Pero el caso que aquí nos trae es que los trabajadores llegaron a las ciudades y terminaron por alojarse y malvivir en cobertizos, andenes apartados de las estaciones ferroviarias y en los sótanos de fábricas; espacios, todos ellos, sin condiciones. Es que estamos ahora -y a estas alturas de mi relato- ante el momento histórico que supuso la aparición de una nueva clase social, el proletariado, que por lo general vivía hacinado, en condiciones miserables. La nueva forma de producción masiva requería de mano de obra que produjeran más en menos tiempo a cambio de un salario; donde residiera el trabajador no era la cuestión prioritaria para el empleador. Entra en liza la clase obrera que constituye la llamada fuerza de trabajo, sin ser los dueños de los medios de producción.

Con el tiempo llegaron las propuestas de análisis del trabajo y los postulados en los modelos para llegar a la felicidad de los productores; pero lo inicios, duros.

Entraron en liza los cottages[6] británicos, los mietskaserne[7] alemanes, las Peabody Housing (viviendas populares de George Peabody[8]), los experimentos utópicos plasmados en New Lanark (del que ya nos hemos ocupado en este Blog; de Robert Owen), las ideas de Charles Fourier en sus falansterios[9], el paternalista proyecto de sir Titus Salt (Saltaire[10]), los familisterios[11] de Jean Baptiste Godin… Ideas no faltaban; como ahora, pero menos peregrinas y más realistas.

Podemos complicar la cosa a mejor en este breve repaso y llegar a los Dumbel Tenement[12] yankis, pero estaríamos en lo mismo. En todas partes hubo realidades y aquí hubo talante.

En España llevamos retraso en lo de la vivienda social tal vez porque llegamos tarde a la Revolución Industrial y más tarde al proceso industrializador y a la cuestión de los alojamientos obreros.

Si antes el ejemplo fue Madrid y sus corralas, ahora, con la industrialización, la gran ciudad obrera de España fue Barcelona[13]. Me viene a la cabeza aquella serie de TV en blanco y negro, la Saga de los Rius. Las primeras grandes fortunas de la burguesía catalana se forjaron en la trata de esclavos en la isla de Cuba y en el algodón y el vino; pero en lo primero más. Y no se estaba muy mucho por la vivienda social, aunque hubo ejemplos muy interesantes.

Pero mucho antes que en España y en los lugares europeos de la primera revolución industrial, la vivienda del obrero comenzó a ser vista ya en el siglo XV en Italia. Antonio Averlino, Filarete, arquitecto y teórico de la Arquitectura del Renacimiento, ya habla, en su Tratado de Arquitectura (1475) de, digamos, cierto tipo de soluciones habitaciones -es que, otro genio y figura que fue la ministra María Antonia Trujillo, allá por 2004, nos colocó sus soluciones habitacionales de 30 metros cuadrados[14]- bajo esta premisa: “Para un pobre que no puede llegar a tanto aderezo, que se haga lo que se pueda, con tal de que esté a cubierto. Tal casa no necesita mayor medida ni distribución de sus miembros, sino únicamente un rectángulo (...) la distribución hazla a tu manera, porque éste tiene poco dinero y no precisa calentarse los cascos para gastar, sino para saber administrarlo, de modo que con poco tenga una casa. Haz lo que puedas[15].

Y el haz lo que puedas de Filarete se convirtió en norma.

Y lo que pudo y quiso hacer Jakob Fugger/Jacobo Fúcar, alias “el rico” -gracias al monopolio del cobre en toda Europa y en aquella Alemania donde más del 90% de la población no tenía apenas dinero, vivía entre calamidades y estaba explotados por los señores- en 1516 fue el Fuggieri, un barrio de viviendas sociales para indigentes -sin deudas y católicos- de Augsburgo.

Esto no son más que “ideícas”; vayamos al meollo de la cuestión.

La vivienda social cobra protagonismo en el XIX (en 1842) tras el Informe Chadwick[16], del que fue autor Edwin Chadwick, quien desde 1833 había dirigido en Londres una comisión contra la pobreza y había tratado con profundidad el tema.

Tan sólo una década después (1853) y a pesar de contar ya con una Comisión de Asuntos Sociales (Segismundo Moret, 1844), en España se comienza a hablar del tema, pero hasta 1911 no habrá un planteamiento legal a pesar del trabajo de los krausistas positivos como Gumersindo Azcárate, Francisco Giner de los Ríos y hasta la constructora benéfica de Concepción Arenal[17]; de Adolfo Álvarez-Buylla, de Francisco Méndez Álvaro -efímero alcalde de Madrid- y otros destacados próceres más, mientras el tema llegaba a congresos internacionales (de casas baratas) en París (1889 y 1900), Amberes (1894), Bruselas (1897) o Dusseldorf (1902).

Estamos hablando de nivel de vivienda social reducida en ciudad, aunque vivienda social también son las que se construyeron tras el terremoto que asoló la Vega Baja en 1829, diseñadas por Larramendi[18], y de las que aún se conserva una en Almoradí, entregada en 1832 a una familia de damnificados que había quedado sin recursos, a iniciativa del obispo Félix Herrero. En esa localidad fueron 124 viviendas de ¡140 metros cuadrados de parcela!, con 90 de casa y el resto, corral y cuadra[19]. Y en otros puntos de la Vega Baja

A España, el primer proyecto serio de vivienda social llega en 1908 mucho después de ponerse en marcha y de haberse creado el Instituto de Reformas Sociales (1903). La ley llegará en junio de 1911 y el Reglamento que la desarrolla en abril de 1912; aunque hubo que esperar a la Ley de Casas Baratas de 1921, que favorecía la entrada de sociedades en la construcción de dichas viviendas, para ver las primeras cooperativas de carácter profesional (funcionarios, militares, empleados municipales, carteros, periodistas, descargadores de algodón, ferroviarios etc.) Y en ciudades como Alicante, Burgos, Córdoba, Orense Bilbao, Zaragoza una serie de entidades relacionadas con la Iglesia (bien a través del obispado o del sindicalismo de los Círculos Católicos Obreros) participaron en el primer tercio de siglo XX en la organización y promoción de cooperativas de casas baratas.

El problema de los alquileres no es de hoy y las propuestas de remedio siempre han sido muy peregrinas; ahí están el decreto Bugallal[20], de 1920, que congeló los alquileres en las ciudades de más de 20.000 habitantes, no tardando en hacerse extensivo a toda España, y la Ley Salmón, de 1935, de previsión contra el paro, que limitaba también los alquileres. Ambas fracasaron. Y las lanzaron ministros conservadores.

Federico Salmón Amorín fue un alicantino; ministro de Trabajo de la República por la CEDA que acabó sus días fusilado en Paracuellos del Jarama (07.11.1936). En 1931 propuso la creación del Servicio de Crédito Social en colaboración con el Instituto Nacional de Previsión y las Cajas de Ahorro, donde surgirán nuevas cooperativas de viviendas y con la Ley Salmón (21.06.1935) se fomentará la vivienda de alquiler y el construirlas para alquilarlas. Es el caso de las llamadas “Casas Salmón”[21].

Aunque siguiendo la historia de la vivienda social hallamos saltado a los urbano de las grandes ciudades, en este repaso no podemos olvidar que en 1926 una iniciativa del Partido Socialista puso en marcha los llamados poblados de Casas Baratas[22].

Y ya saltamos a la contienda donde el Servicio Nacional de Regiones Devastadas y Reparaciones (SNRDR) fue un organismo invento creado el 31 de enero de 1938 orientado a la reconstrucción de las localidades y edificios muy dañados por la guerra. Finalizada la contienda pasó a denominarse, en agosto de 1939, Dirección General de Regiones Devastadas y Reparaciones (DGRDR). Junto con la Dirección General de Arquitectura (DGA) quedó bajo la responsabilidad de Pedro Muguruza[23], quien sería el encargado urbanista de la reconstrucción del país.

En 1939 también llegará el Instituto Nacional de la Vivienda[24] que con la Obra Sindical del Hogar[25] promoverá Viviendas de Protección Oficial en una España víctima de su sempiterno retraso y la devastación de una guerra civil.

Una vez concluida la Guerra Civil, en la década de los 40, un millón de personas abandonó el medio rural y se dirigió a las ciudades, pero fueron 2’3 millones los españoles que lo hicieron entre 1951 y 1960 encaminándose hacia Madrid, Barcelona y Bilbao. Y como consecuencia surgieron los barrios chabolistas: Orcasitas y Pozo del Tío Raimundo en Madrid; La Mina o Verdún en Barcelona.

Pero en el período 1940-46 se construyeron más de 13.400 viviendas anuales y entre 1947-1954 ya se trabajó al volumen inicialmente planteado de 16.000 viviendas anuales. En 1950 el Gobierno estimaba que existía un déficit de un millón de viviendas en aquella España para cumplir su proyecto de “una familia, una vivienda” a base de planes de viviendas protegidas, de viviendas bonificables y de viviendas de renta limitada. Objetivo: garantizar el acceso a la vivienda de todos.

En 1954, España se dota de la Ley de Viviendas de Renta Limitada y en 1958 de la Ley de Viviendas Subvencionadas. Entre ellas, en 1955, el Plan Nacional de la Vivienda; una Orden de 12 de julio de 1955 que desarrolla el Decreto de 1º de julio de 1955.

El Ministerio de Vivienda[26] fue creado tras la aprobación de la Ley del Suelo, en el año 1957, pasando a asumir competencias de urbanismo que hasta ese momento dependían del Ministerio de la Gobernación.

Aquella España no conseguía solucionar el problema. Entre 1950 y 1957 sólo habían conseguido construir y entregar medio millón de viviendas; la mitad de las necesarias en 1950. Se recurrió al Plan de Urgencia Social de viviendas subvencionadas de 1957 que en los años sesenta consolidó el proceso de urbanización de España.

A esto ayudó mucho la estabilidad de la economía -Plan de Estabilización de 1959- y proceso de industrialización del país. En 1960 el 56% de la población se consideraba urbana y en 1981 era ya del 73%. España cambió y se convirtió en una sociedad de clases medias llegando entonces el II Plan Nacional de la Vivienda (1961-1975) que llevó a cabo, en 14 años, la construcción de algo más de 4 millones de viviendas, cantidad mínima para eliminar el déficit de pisos del que se partía.

Entre 1960 y 1980 el número de viviendas familiares se duplicó, pasando de 7,7 millones en 1960 a 10,6 en 1970 y 14,7 al comienzo de los 80. Entonces, lo he vivido, la mayor parte de los españoles consiguieron una vivienda que pagaban en menos de 15 años, a pesar de que los intereses bancarios llegaron a superar a principios de los ochenta el 16’61%.

Me decía esta mañana el padre de Lucas, al que he encontrado muy lúcido y bien, que me acordara de la escena de “El Verdugo[27] (1963), de Luís García Berlanga; que el yerno tome el relevo laboral de verdugo para mantener el pisito en el que viven. Y “el pisito” me ha llevado a la película de 1959 de ese título en la que Petrita (Mary Carrillo) y Rodolfo (José Luis López Vázquez) están en un noviazgo eterno -de una docena de años ya- por no poder comprarse un piso; entonces ella tiene una brillante idea[28].

Ideas son lo que faltan para llegar a una solución al tema de la vivienda. Ahora mismo en España hay 290.000 viviendas de titularidad pública calificadas como vivienda social. Las Comunidades Autónomas son titulares de 180.000 viviendas, y los Ayuntamientos de las restantes 110.000 viviendas. Y esto se mueve poco. Con el último informe, que llega a datos consolidados de 2021, la inversión española en políticas de viviendas se situó en el 0,22% respecto al PIB. En línea dicen los exegetas con el 0,25% del conjunto de la Unión Europea. De momento, un poco más bajo; pero la diferencia entre España y el resto de la Unión Europea en materia de vivienda social es la forma de tenencia. Mientras en Europa va al alquiler social, en España se sigue trabajando para la compraventa, alquiler y alquiler con opción a compra.

Y esto hay que arreglarlo. Porque la idea de Petrita no es solución tampoco en 2023.




[2] La Taula del Bon Profit es una costumbre o ritual de la ciudad de Benidorm. Consiste en una reunión de personas nacidas en el municipio para cenar y mantener una charla sobre temas culturales valencianos, el último viernes de cada mes. Empezó el 1972, motivada por la certeza que la identidad benidormera se estaba perdiendo. No es solo una reunión de amigos, sino que tiene su idiosincrasia. El lema “entre todos lo haremos todo/entre tots ho farem tot” define claramente esa identidad y es obligatoria habla en valenciano. No se puede hablar de religión ni de política. En teoría, las mujeres no pueden ir a estas reuniones, aunque últimamente fechas de excepción. Entre las peculiaridades de este encuentro está el cap de taula/jefe de mesa, una persona importante de la población, y l’avisador/el avisador, encargado de convocar a la gente. El tercero de los honores es el de xarraire, un invitado ilustre -un historiador, poeta, lingüista, científico o personalidad con cierto prestigio- que ofrece la disertación. Lleva 495 cenas hechas, y últimamente se ha ensanchado en toda la comarca. http://www.diccionaridebenidorm.org/entrada/1063/taula-del-bon-profit

[3] 21.000 viviendas que podrán comprar comunidades y ayuntamientos para solucionar la emergencia habitacional de sus regiones; hasta 15.000 pisos que se construirán para alquiler asequible en suelos de Sareb, de la mano de empresas privadas; y la propuesta de un alquiler social a 14.000 inmuebles en situación irregular.

[4] 46.542 viviendas disponibles, 34.759 anejos (garajes y trasteros), 14.202 obras en curso, 24.619 suelos y 13.192 inmuebles terciarios (oficinas y locales). Luego resulta que unos 14.000 inmuebles ya están ocupados en estos momentos de manera irregular, en gran medida por personas y familias en situación de vulnerabilidad. Otras 15.000 viviendas de las 50.000 prometidas no existen y tardarán años en existir. Las 21.000 viviendas restantes hasta las 50.000 forman parte del portfolio que Sareb acumula desde la caída de las cajas y bancos rescatados y se encuentran en fase de comercialización o en obras para su adecuación. En concreto, sólo 9.000 viviendas ya están terminadas y listas para entrar a vivir, mientras que otras 11.900 que están pendientes de adecuación. Los suelos menos atractivos están destinados al llamado proyecto Viena, un plan de colaboración público-privada que cuenta con 112 suelos identificados para construir 10.000 viviendas por fases, aunque la cifra final podría elevarse en 5.000 más en función de la evolución de los activos de la sociedad. El proyecto Viena se encuentra en fase de estudio con PwC en colaboración con la Sareb y su efectividad para hacer frente a las tensiones en el mercado de las grandes ciudades podría ser limitada, ya que los suelos incluidos en él se encuentran en municipios menores y en zonas con menos población, donde la demanda y la presión sobre los arrendatarios es más baja o incluso inexistente. https://www.elmundo.es/economia/vivienda/2023/04/17/643d53ab21efa093538b45b5.html

[5] Viviendas sin luz ni aireación, donde se acrecienta el riesgo de mortalidad por la falta de condiciones higiénicas, a la vez que, para la moral de la época, se favorece la inmoralidad sexual. Oscuras y mal ventiladas, el tamaño de las casas era minúsculo, no pudiendo superar, por ley, los 30 metros cuadrados, a pesar de lo cual lo habitual es que estuvieran ocupadas por dos o más familias numerosas, que vivían juntas para compartir el alquiler. Estas viviendas se creaban estancias usando como paredes biombos o cortinas con cortinas. Por lo general se dividían en dos cuartos: uno a la entrada, hacía las veces de cocina, comedor y cuarto de estar; otro al fondo,  servía de dormitorio y armario. El hacinamiento y la falta de higiene propiciaban la aparición de plagas e infecciones. El retrete era común para todos los vecinos. Solía haber uno por planta y las familias se turnaban tanto a la hora de utilizarlo como de limpiarlo. Cuando querían asearse más en profundidad, los vecinos tenían que recurrir a las casas de baños municipales más cercanas. El patio era el eje sobre el que se construía la vida comunitaria en la corrala, una suerte de las añoradas plazas de los pueblos de los que provenían los vecinos: allí jugaban los niños, los abuelos tomaban el fresco y las mujeres lavaban con barreños de cinc en las fuentes surtidas por los viajes de agua subterráneos. Todo ello bajo la supervisión de dos importantes personajes, de gran autoridad: la portera y el administrador o casero. La portera era una institución en la corrala. Velaba por los vecinos, por el inmueble, por las buenas costumbres y era por lo general una figura muy respetada. El casero, por su parte, era un vecino a quien el dueño contrataba como administrador y guardián del edificio, encargándose de cobrar los alquileres y de poner orden cuando hacía falta.

[6] Vivienda de ladrillo de una o dos plantas en la que se distribuían de dos a cuatro piezas, una de ellas servía de cocina y, en el mejor de los casos, incluía un sótano. Estaban conformadas para aproximadamente 20 personas. Estas viviendas se construyeron inicialmente de forma irregular y dispersa, pero con el tiempo comenzaron a compactarse y extremar el hacinamiento en largas hileras.

[7] Cuartel de vivienda (cuartel residencial) es un edificio de vivienda de varios pisos en el centro de la ciudad con uno o más patios interiores de la época de la industrialización alemana (Gründerzeit), que fue construido para amplios estratos de trabajadores y empleados. Solían ser construidos por grandes terratenientes o sociedades inmobiliarias, precursoras de las sociedades inmobiliarias actuales.

[8] El primer bloque fue construido por H.A. Darbishire, que fue un arquitecto muy vinculado a la construcción de vivienda social, y que trabajó para el Fondo hasta 1885. Este primer bloque se levantó en Commercial Street, Spitalfields, del que se conserva un grabado en el Illustred London News (1863). El edificio constaba de 57 pisos, 9 comercios con vivienda, baños, lavandería y retretes junto a las escaleras para cada dos viviendas. Los pisos eran estándar. La mayoría tenían dos dormitorios, fregadero y servicios propios, y se arrendaban por dos chelines a la semana. Hacia 1882 había ya un total de tres mil quinientas viviendas, que albergaban a más de catorce mil personas.

[9] El falansterio es la comunidad de producción, consumo y residencia teorizada por el socialista utópico francés Charles Fourier como base de su sistema social igualitarista. Eran de carácter agrícola y estaban formados por grupos de 1.620 personas. En estas comunidades la competitividad económica era abolida, no había salarios ni propiedad privada. Se fundaban en la idea de que cada individuo trabajaría de acuerdo con sus pasiones y no existiría un concepto abstracto y artificial de propiedad, privada o común. Todos los individuos participarían de la propiedad de la tierra y los medios de producción

[10]Saltaire es una colonia industrial (Model village en inglés) de la época victoriana. Fue fundado en 1853 por Sir Titus Salt, un industrial líder en producción de lana en Yorkshire. El nombre del pueblo es una combinación del apellido del fundador con el nombre del río Aire. Salt trasladó todo su negocio (cinco molinos separados) de Bradford a este lugar cerca de Shipley en parte para proporcionar mejores alojamientos para sus trabajadores que podrían tenerse en Bradford y en parte para albergar su gran molino textil por un canal y un ferrocarril.

[11] El familisterio Godin es un falansterio creado en 1880. En 1854, Jean-Baptiste André Godin (1817-1888), industrial y socialista fourierista francés, fundó en la localidad belga de Forest una sucursal de las fundiciones de Guisa (Aisne, Francia). En 1858, trasladó esta unidad de producción a lo largo del canal de Willebroek, de Laeken. El familisterio de Laeken no tuvo un desarrollo comparable al de Guisa. La Sociedad del Familisterio cesó sus actividades en 1968 y se disolvió. El inmueble de Bruselas fue vendido y convertido en oficinas. El familisterio fue reconvertido en hotel de empresas, pero no tuvo éxito.

[12] Vivienda multifamiliar de alquiler comúnmente construida entre 1879 y 1901. Consistía en un edificio de cuatro a seis pisos de altura con cuatro apartamentos en cada piso, se reconocía por su característica forma de mancuerna. En cada apartamento vivían hasta 18 personas. Se conformaban por tres habitaciones, dos de las cuales compartían una ventana interior que permitía que la luz llegara a la habitación interior. Se ingresaba por la cocina donde se encontraba una estufa de leña y una bañera de concreto que se cubría con tablas y servía como mesa de comedor. Antes de 1901, los residentes usaban letrinas en el patio trasero, posteriormente, se instalaron dos baños comunes en cada piso.

[13] El arranque industrial de finales del XVIII, al igual que en el caso británico, se basó en el algodón, cuando la mecanización de la hilatura en tierras catalanas avanzó notablemente gracias a la adopción de la hiladora spinning jenny. Desde mediados de la década de 1730 el surgimiento de la manufactura de indianas -tejido elaborado con algodón estampado-; un sector moderno, muy concentrado al principio en Barcelona y dedicado inicialmente sólo a la estampación, pero que después incorporó las fases de hilatura y tejido. Catalunya experimentó un proceso de crecimiento smithiano (Adam Smith) desde las últimas décadas del siglo XVII y durante el siglo XVIII. La mecanización de la hilatura siguió avanzando, con una versión autóctona mejorada de la spinning jenny -la berguedana-, y con máquinas de hilar accionadas por la fuerza del agua de ríos y torrentes -la water frame- y de caballerías -la mule Jenny-. Barcelona se convirtió en la principal concentración industrial del Mediterráneo durante el siglo XIX.

[14] María Antonia Trujillo, barajaba incluir "soluciones habitacionales" de 30 metros cuadrados para "situaciones transitorias" en el Plan de Vivienda 2005-2008. Las 180.000 viviendas anunciadas en 2004 tras torpedear la Ley del Suelo del PP. https://www.libremercado.com/2004-05-29/editorial-el-ministerio-de-las-soluciones-habitacionales-5209197/

[15] Pedraza, P. (Ed.): Tratado de arquitectura. Antonio Averlino, Filarete; Vitoria, Ephialte, 1990, pág. 201.

[17] De la abogada, pensadora, periodista, poetisa y autora dramática y de la Condesa de Espoz y Mina. Se fundó esta asociación en Madrid el 28 de abril de 1875 en una reunión celebrada en el Ayuntamiento bajo la presidencia del Conde de Toreno, alcalde por aquel entonces de la capital. El motivo fue el de hacer efectivos dos importantes legados. Uno de 30.000 pts. que la Condesa de Krasinscky, austriaca, entregó en 1874 al embajador de España en Paris Salustiano Olózaga para que se destinasen a beneficio de los trabajadores españoles. El otro de 7.425 pts.  donados por Gertrudis Gómez de Avellaneda, novelista y dramaturga. A estas dos cantidades se sumaban 13.478,30 pts. importe de una suscripción hecha en París por iniciativa de Salustiano Olózaga. La propuesta era construir viviendas higiénicas, cómodas y económicas, y además con la idea de inculcar en estas clases hábitos de orden y aseo, virtudes que, por su comportamiento y costumbres. La primera actuación de La Constructora Benéfica en 1883. Barrio del Pacífico, en la calle particular de la Caridad,  muy cerca de la estación ferroviaria del Mediodía, para aproximar la vivienda al lugar de trabajo de los destinatarios de las casas, que se empleaban en los talleres de la Compañía del Ferrocarril del Mediodía, donde se construyeron 38 casas para 58 familias compuestas por viviendas colectivas de tres plantas, dos a cada lado de la calle, con cuatro viviendas por planta. Las viviendas unifamiliares, un total de 22, constaban de entrada, cocina, dos habitaciones y retrete en el exterior junto al patio.

[18] José Agustín de Larramendi Muguruza (1769-1848) el vasco que articuló España, fue un político, ingeniero y geógrafo español, autor, junto con el mallorquín Felipe Bauzá, de los trabajos que dieron origen a la actual división provincial española. Al organizarse, en septiembre de 1796, el Real Cuerpo de Ingenieros Cosmógrafos,  Larramendi fue agregado con el grado de teniente y nombrado profesor de Meteorología. Alto cargo de la Dirección General de Correos, Postas y Caminos en 1821. Cuando el 21 de marzo de 1829 se produjo un terremoto que arruinó cerca de quince pueblos de la comarca de la Vega Baja. Larramendi, comisionado para estudiar los estragos y proponer soluciones, recorrió la zona detenidamente y tras un primer informe en que proponía la reconstrucción de los pueblos, el 6 de junio remitió las plantas, de trazado hipodámico, para las poblaciones de Torrevieja, Benejúzar, Rojales, Guardamar y Almoradí, junto con una memoria con las normas de carácter antisísmico que debían seguirse para la construcción de calles y edificios. Recomendaba asimismo nombrar superintendente “con facultades omnímodas” al obispo de Orihuela y nombrar facultativo principal al ingeniero de los pantanos de Lorca Eugenio Fourdinier. De su mano salió el trazado actual de poblaciones como Torrevieja, Guardamar, Benjúzar o Almoradí después de que un terremoto las hubiese reducido a ruinas en marzo de 1829.

[19] Suelo de tierra, techos con cañizo y entrevigado de madera de pino. Sobre una superficie aproximada de 140 metros cuadrados se construyó una vivienda de 90 metros. El resto de la superficie se destinó a corral y cuadra. Se accede por un portón doble desde la calle y la vivienda está distribuida en dos habitaciones en la fachada, cocina-estar y una pequeña dependencia junto a la cocina. Su pavimento era de tierra apisonada. En la cocina hay un fogón bajo la gran chimenea y la leja de la campana, con espacio para enseres y ollas, además de un tinajero. El corral consta de una pequeña cuadra o establo, cuyo único acceso de entrada o salida es la puerta principal, de ahí el motivo que sean de doble hoja, facilitando el trasiego de animales. https://www.lavanguardia.com/local/valencia/20190102/453906022948/primera-vivienda-social-espana-almoradi-museo-terremoto-1829-larramendi.html

[20] Gabino Bugallal Araújo, II Conde de Bugallal (1861-1932). Como ministro de Gobernación, Bugallal tuvo dos responsabilidades principales en 1920: organizar las elecciones del 19 de diciembre; y dar cobertura a la política represiva, de “mano dura”, contra las organizaciones obreras. En medio de huelgas y bajo la presión social del movimiento obrero y de las ligas de inquilinos promulgó el decreto.

[22] Cooperativa Pablo Iglesias,  fundada en la localidad cordobesa de Pueblonuevo del Terrible -municipio situado en la provincia de Córdoba, que existió entre 1894 y 1927; hasta la fusión- en diciembre de 1926 por iniciativa de un grupo de obreros socialistas de Peñarroya-Pueblo Nuevo y que alcanzó en 1937 los 60.000 socios;  llegaría a publicar una revista El Hogar Obrero, y a promover varias ciudades-jardín, aunque debido a las vicisitudes del periodo solo pudo construir un total de 244 viviendas en diversas ciudades españolas. Comenzó sobre unos terrenos donados por la Sociedad Minera y Metalúrgica de Peñarroya. Tras el término de la guerra civil, en 1939, fue ilegalizada y sus propiedades incautadas por el Instituto Nacional de la Vivienda. Se ha criticado su conservadurismo en sus planteamientos urbanísticos, desarrollados en torno a un modelo de ciudad-jardín y ajenos a otras más propuestas contemporáneas más rompedoras.

[23] El arquitecto Muguruza organizó la profesión y definió el nuevo estilo junto con Pedro Bidagor, Gutiérrez Soto y López Otero. En abril de 1939, en la primera asamblea nacional de arquitectos se plantea el dotarse de un plan de reconstrucción en el que se marquen las directrices fundamentales para la misma. Se buscaba crear líneas de actuación unificadas. Junto a la Dirección General de Arquitectura y dependiente de ella se crean también la Sección de Urbanismo y el Centro Experimental de Arquitectura

[24] Ley de 19 de abril de 1939 establece un régimen de protección a la vivienda de renta reducida y crea un Instituto Nacional de la Vivienda, encargado de su aplicación. Su misión fue la de dictar normas de construcción, seleccionar tipos de viviendas y materiales, ordenar y orientar las iniciativas de los constructores y contribuir, otorgando determinados beneficios, a la edificación de casas de renta reducida, procurando que se atienda, en primer término, a las necesidades de los más humildes y que las casas reúnan las más exigentes condiciones de higiene y de calidad de construcción. Tras el Decreto de 26 de abril de 1957 por el que se aprueba el Reglamento orgánico provisional del Ministerio de la Vivienda y en la Dirección General de la Vivienda se integra el Instituto Nacional de la Vivienda. Aunque siempre estuvo bajo la tutela de los ministerios del Ejército y Marina; instrumentalizado por el Régimen para, mediante las viviendas adjudicadas, sobrepoblar con policías y militares zonas conflictivas.

[25] Fundada el 10 de diciembre de 1936, la OSH nacía con el objetivo de intentar solucionar el problema de la vivienda mediante la construcción y administración de viviendas de construcción pública, que luego se vendían a bajo precio. Formó parte de la Organización Sindical Española y estuvo adscrita a la Delegación Nacional de Sindicatos. Cuando la OSH fue creada dependía del ministerio de la Gobernación; en 1957 pasó a depender del ministerio de la Vivienda. Según datos de la propia OSH, entre 1939 y 1960 habría construido 138 686 viviendas en la Colonia Experimental de Villaverde Alto de Madrid y los barrios del Verdún de Barcelona, San Roque de Badalona, de Contrueces de Gijón, de Yagüe de Logroño y de Dos Hermanas de Málaga.

[26] El primer ministro de la Vivienda fue un falangista camisa nueva y arquitecto José Luis de Arrese, al que sucedió José María Martínez Sánchez-Arjona, Vicente Mortes, José Utrera Molina, Luis Rodríguez de Miguel, siendo el último ministro de la Vivienda Francisco Lozano Vicente, gobernando ya Adolfo Suárez, hasta su desaparición en 1977. El presidente Rodríguez Zapatero lo volvió a crear en 2004 encargándose por primera vez de la cartera María Antonia Trujillo. Este ministerio volvió a ser suprimido en octubre de 2010.

[27] El Verdugo nos cuenta la historia de José Luis, el empleado de una funeraria que desea emigrar a Alemania, pero las circunstancias lo obligan a casarse con la hija de un verdugo profesional. Amadeo, que tiene su jubilación a pocos meses, convence a su yerno para que herede el puesto de verdugo que él va a dejar vacante, para así poder mantener la vivienda del estado.

[28] Rodolfo se casará con Doña Martina, su anciana y enferma casera, de manera que cuando esta fallezca heredará el contrato de alquiler sobre el inmueble a bajo precio. Tras la ceremonia, sin embargo, la anciana todavía será capaz de sobrevivir dos años. Finalmente fallece, y Petrita y Rodolfo ven cumplidos su objetivo, aunque el pesimismo y la tristeza reinan en el ambiente.

16 abr 2023

DE QUE LOS INDIOS SON MÁS… 1.400 MILLONES YA

  

Si tiene tiempo, el informe de la ONU sobre este tema[1] es muy socorrido. Yo, disculpen la inmodestia, soy más divertido contándolo. Esta va de indios. Y arranca el tren; a esta velocidad no nos lo asaltan… Ah, que esto va de indios de la República de la India (Bhārat Gaarājya) -en principio, que luego lo complicaré con alusión al Villarato- y nada de los pueblos nativos de los EE.UU. de los que hemos sabido recientemente que ya en 1.600 montaban équidos ibéricos[2]. Así, entre caballos españoles, zahones[3] y chaparreras[4] andaluzas, se montó el Far West[5] de Juanita Calamidad[6]; que quienes marcaron el territorio fueron los dragones de cuera[7] (de lo que ya hablamos en este Blog); luego los yankis hicieron lo suyo desde los tiempos coloniales -y Jedediah Smith fue el primero que se aventuró en 1821- hasta la Masacre de Wounded Knee[8] y el establecimiento definitivo de la frontera de EE. UU. en 1890. Me puede el cromosoma Ñ.

En fin; que me centro en cuestiones de población que la neurona ociosa me desvía del camino del recto proceder. Ya llevamos velocidad, así que… ¡comenzamos!, ¡comenzón!

En 2022 nacieron 134 millones de bebés en el mundo; y la mitad de ellos lo hicieron en Asia (49,94 %). Y uno de cada tres, en África (34,21 %); que esa es la próxima.

En 2022 también fallecieron 67 millones de personas en el mundo, dos millones menos que en 2021. El 55 % de las muertes se produjeron en Asia, frente a un 17,82 % de África. Por cierto, continente envejecido, un 14,12 % de las muertes se produjeron en Europa.

Con este saldo de nacimientos y muertes, la población global creció en 66,8 millones de personas el año pasado.

Así, podemos decir que, pormenorizando de media para esta década -que esto de los hijos no es que sea moda, pero va a espasmos económicos-, en el mundo nacen cada día 372.960 personas y mueren 155.520; vamos: 2,39 nacimientos por cada muerte. Con ello, el crecimiento diario medio de la población mundial es de 217.440 personas por día.

¿Sabía Ud. que cada segundo que pasa la población urbanita del mundo aumenta en 2 personas? Un dato, de por sí, acojonante” escribía yo en un post de diciembre de 2013. Luego añadía que “eso es en las ciudades”, porque si en un año se producen 140 millones de nacimientos humanos en el planeta (hace una década; que ahora, les he contado al comenzar el Post, en 2022 nacieron 134 millones) resulta que, simple operación matemática (por aquellos de los 365 días del año y los 31’5 millones de segundos de un año[9]) que son cuatro bebés los que computamos en el mundo cada segundo: 2 en áreas urbanas -miren India, China y Nigeria, por ejemplo- y 2 en áreas rurales. Y resulta que -cosas de las matemáticas estadísticas- 2’4 de esos bebés nacen en Asia, China e India principalmente.

Ya en varios posts pretéritos alertábamos de que la India adelantaría a China en población en la tercera década del siglo XXI -en la que estamos- y ya es oficial (ONU dixit[10]) pero el pronóstico académico era que India supere a China como el país más poblado del mundo para mediados de abril; y como cuando esto escribo al chaca-chacha-chá/traca-traca-trá del tren es aún día 15… pues eso. Ahora con esto de la Alta Velocidad he de aprovechar el tiempo que dos horitas no dan para nada.


Los datos estadísticos y las cifras corroborantes son muy claras. Y este ejemplo que le aliño es esclarecedor.

Usando datos del World Factbook[11] de la CIA, Pratap Vardhan, que es un indio de la India que maneja la estadística y la computación como nadie, elaboró hace nada este mapa señalando, por países, aquellos que tienen más probabilidades de dar la bienvenida a los próximos recién nacidos. Utilizó datos de 2022 que es, como quien dice, de hace 20 minutos y sale que mientras que en España vendrían al mundo 2, a India llegarían 172 cigüeñas.


India ha arrebato el pódium de población a China. Y eso, sin tener en cuenta las cifras de fallecidos Covid19. Hasta diciembre de 2022 y desde que fue detectada la enfermedad (oficialmente el 8 de diciembre de 2019) China computaba 10.775 fallecidos. (No vale descojonarse ahora; aguante).

Luego nos sorprendió que, en enero de este año, de sopetón, añadiendo casi 60.000 fallecidos más.

La última cifra que localizo, del 9 de febrero de 2023: 83.150 fallecidos. Y se quedan tan panchos. (Aquí ya vale descojonarse)

India también tiene lo suyo: frente a las 521.966 muertes oficiales a cierre de 2022, las estimaciones hablan de 3’2 millones de víctimas (de China, es tal el marasmo[12], que ni en las estimaciones millonarias se ponen de acuerdo). Y, aun así, con estas cifras, India adelantan a China en población.

India también tiene su “tocao” particular: lanzó un programa de planificación familiar en 1952 y estableció una política nacional de población por primera vez en 1976, esterilizaciones forzadas de millones de personas pobres y aún, así, insisto, una de cada cinco personas menores de 25 años que puebla el mundo es de India; y el 47% de los indios tienen menos de 25 años. Y agárrense fuerte porque hoy, la edad media india es de poco más de 28 años; y sólo un 10’8% de los indios tienen más de 60 años. Ah, y 7 millones de niños y niñas menores de 10 años malviven en slums[13].

Cristina García Rodero[14], en junio pasado, con su expo “Tierra de Sueños[15] nos dejó a las puertas del Ayuntamiento de Benidorm la mirada de las mujeres y las niñas en Andhra Pradesh[16], una zona rural y se descargó un speach, al sol de junio, que no vean. A pesar de que la Constitución de la India les reconoce igualdad, la situación de las mujeres en la India es bastante dura. El peso de la religión en la sociedad y el calado de las más ancestrales tradiciones arrumba a las mujeres a un extraño nivel, especialmente en las clases menos pudientes.

Y luego está el índice de masculinidad (52/48; por cada 1.000 niños de hasta 6 año, 916 niñas). Es tan alto porque, en India, el 41% de las niñas no llegan a nacer. Se las consideran una ¡carga social! India es el cuarto lugar más peligroso del mundo para nacer mujer. Las familias con menos recursos quieren evitar a toda costa endeudarse con prácticas ancestrales como la dote no teniendo hijas. Las mujeres indias sufren discriminaciones y sus libertades son vulneradas cotidianamente.

Según el estudio económico de 2011 del propio gobierno de la India, el país tenía 63 millones de mujeres menos de las que debería tener[17]. Los expertos coinciden en que se debe al gran número de abortos selectivos de niñas. Sigo buscando el dato para esta década; no debería haber ido a peor.

Y eso, a pesar de que desde 1994, el país prohíbe las pruebas para saber el sexo del bebé durante el embarazo, pero eso no impide que aún hoy, 2023, el 41% de las muertes neonatales femeninas sean deliberadas. Además, en el caso de que se produzca el nacimiento, es frecuente que las familias intenten acabar con la vida de esas niñas durante su infancia, con la ausencia de cuidados médicos o una mala alimentación. Y las que siguen adelante tienen que hacer frente a la condición de maternidad.

La tasa de natalidad en la india está ahora mismo en algo menos de 2’05 hijos por mujer -que los expertos achacan, -¡ojo!- a un declive de fertilidad; por debajo de la tasa de reemplazo generacional de 2’1 hijos mujer… pero hay tantos chinos, indios, nigerianos… miles de millones.

Pero no se me “asusten”, que esto tiene un límite. The Lancet[18] publicó en julio de 2020 su proyección[19] y el pico de población planetaria y mundial se alcanzará en los años sesenta del siglo XXI, sin llegar a los 11.000 millones de habitantes que una proyección de arranque se siglo colocó para el año 2100.


Los 9.700 millones pronosticados entonces para 2050 se alcanzarán, al menos, 15 años después y al final estaremos en los 8.800 millones de habitantes en 2100. Ahora mismo sabemos que estadísticamente superamos los 8.000 millones en noviembre de 2022, por lo que a estas alturas de abril estaremos en las cifras de máxima población planetaria futura camino de los 8.800 millones, con permiso de Putin y su guerra que le está costando un pico en bajas[20]: 171.160 en los datos ucranianos, de los que 70.000 serían muertos y el resto heridos.

En India tenemos incidencias demográficas de hambrunas, catástrofes o la partición del país con Pakistán. Pero ha habido muchísimas cuestiones más como los “campamentos de Salud” y los programas de esterilizaciones masivas. Y, aun así, subiendo.

Todos estos vaivenes demográficos se explican por detalles tan peregrinos como que el aumento de riqueza en el mundo implica menos nacimientos, mayor nivel de acceso a la educación, un éxodo del mundo y políticas de control de la natalidad. Perro no come perro, pero humano canibaliza humano.

El déficit de nacimientos lleva aparejado un aumento de la edad media mundial, lo que nos pone contra las cuerdas: una sociedad cada vez más envejecida.

En España, ahora mismo, la tasa de natalidad está en 1’23 hijos por mujer. Y si antes dijimos que en la India están ya fuera del reemplazo generacional, con estas cifras, en España estamos a años luz[21] de ese reemplazo y esto no tiene remedio inmediato.  Estamos tan mal que incluso estamos en cifras por debajo de las de los dos últimos años de pandemia, que fuimos fatal en natalicios. Por cohortes, la natalidad solo creció ligeramente -con relación a antes de la covid (2019)- entre mujeres de más de 45 años. Y dicen los sociólogos que es que le vieron las orejas al lobo en su olvidado deseo de maternidad y se pusieron las pilas.

En noviembre de 2022 resulta que la tasa bruta de natalidad patria era de 7,12 nacimientos por mil habitantes, un 1,07% inferior a la del año anterior; el número de hijos por mujer en edad fértil fue de 1,19, un 0,47 más que un año antes; y la edad media a la maternidad -en ascenso- era ya es de 32,6 años.

Con datos consolidades de 2019, en una publicación de junio de 2022, puede consultarse el índice de natalidad de 127 ciudades de más de 50.000 habitantes en España: https://www.eldebate.com/sociedad/20220615/ser-madre-sale-caro-en-las-grandes-ciudades-espanolas-ni-un-hijo-de-media.html  (a mitad de página está la tabla).

Insisto en que esto de la natalidad deberíamos hacérnoslo ver: que una cosa en la infecundidad y otra la infertilidad. La infecundidad es la ausencia de hijos, bien sea voluntaria -como parte de un proyecto personal o conyugal y no se muestra como un problema biomédico- o involuntariamente, sinónimo de infertilidad que no tiene por qué presentar restricciones clínicas de fertilidad. Insisto en tratar este tema con interés porque hay indicios alarmantes de hecatombe: en Cádiz, los mayores de 65 años duplican ya en número a los menores de 16 años[22]: 28.411 frente a 13.543 con el censo caído en 23.000 en ese tiempo.

Saliendo de la trimilenaria[23] ciudad y con los datos de 2022 -que analizados en 2023-, resulta que, el 63% de los nacimientos en España se produjeron en Andalucía, Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana: 207.784 nacimientos.

Seguimos flojos en este tema y envejeciendo. Con datos consolidados de 2021 resulta que la esperanza de vida al nacer la tenemos en 83 años (que había caído el año pasado). Y hay que remontarla, que antes del Covid19 era de 83,6 años. En La esperanza de vida a los 65 años es de 19 años más para los hombres y 23 para las mujeres. La tasa de mortalidad a los 65 años es de 9,3 decesos por cada mil personas de esa edad, 13 muertes entre hombres y 5,7 entre mujeres.

Y como hijo del baby boom[24] alerto del baby crack[25] que puede destruir el estado del bienestar y entonces sí podremos hablar insostenibilidad.

Para que una sociedad prospere lo que se necesita es empleo y oportunidades; incluso una fiscalidad diferenciada. Los cheques bebé, como el que ahora leo, con asombro, que se presenta como medida electoral trasnochada local y anaranjada sólo puede conceptuarse de medida aislada y desvinculada de la realidad del apoyo necesario a las familias en este tema.

Ya el Consejo Económico y Social, en un dictamen, se opuso al cheque bebé del Gobierno ZP de 2007[26], que duró hasta diciembre de 2010. Ya entonces se pidió un Libro Blanco sobre la protección a las familias que incidía en políticas concretas y no en medallitas de plástico como el cheque. Es más, en 2019 la OCDE reclamó a España medidas que fortalecieran a las familias y una ayuda universal por hijo, pues España se encuentra entre los países de la UE que menor esfuerzo dedica al apoyo de la familia y la natalidad.

Así, se puede entender esta situación patria actual.

De diversos estudios se desprende que más que un cheque bebé lo que se necesitan son políticas efectivas que posibiliten a las mujeres tener hijos: estabilidad económica y laboral, el apoyo del cónyuge o pareja en el cuidado de los hijos, la tenencia de una vivienda apropiada y el acceso a escuelas infantiles (0-3 años). Y siempre se habla de corresponsabilidad.

Bueno, pues eso: que China ha dejado de ser oficialmente el país más poblado. La India le toma el relevo.

 



[3] Prenda campera de cuero o paño que se lleva sobre los pantalones para resguardarlos, con las perneras abiertas y atadas por detrás de los muslos.

[4] Prenda de protección que van por encima de los pantalones; carecen de entrepierna, sujetándose por la cintura

[5] Territorio de la expansión de la frontera de los Estados Unidos hacia la costa del océano Pacífico.​ Aunque la colonización del territorio comenzó en el siglo XVI, el objetivo de alcanzar la costa oeste se debió principalmente a la iniciativa gubernamental del presidente Thomas Jefferson, tras la compra de Luisiana en 1803.

[6] Martha Jane Canary-Burke, Calamity Jane (1852-1903), exploradora profesional estadounidense, reconocida por haber luchado contra los amerindios.

[7] A partir de 1772. Soldado de caballería -Caballería ligera del Virreinato de Nueva España- para la defensa de la frontera de los Estados Unidos actuales. Su nombre derivaba de la cuera, prende de protección consistente en una chaquetilla larga sin mangas constituida hasta por siete capas de dura piel, con gran resistencia a las flechas de los indios enemigos. Los dragones de cuera diferían del ejército regular español por su contratación y equipamiento: mosquete (antiguamente llamado “dragón”; de ahí el nombre del soldado), pica, lanza, escudo y espada ancha; cada dragón de cuera tenía de seis a diez caballos a su disposición, un potro y una mula, mientras que un dragón normal solía tener sólo dos. https://ejercito.defensa.gob.es/Galerias/Descarga_pdf/EjercitoTierra/revista_ejercito/Segundo_Premio-2021_Revista_Ejercito_2021_PRESIDIOS_Y_DRAGONES_DE_CUERA.pdf https://publicaciones.defensa.gob.es/media/downloadable/files/links/l/o/los-dragones-de-cuera.pdf  

https://www.despertaferro-ediciones.com/2018/dragones-de-cuera-batalla-san-agustin-de-tucson-apaches/

[8] El 29 de abril de 1890 se produjo la Masacre de Wounded Knee, en Dakota del Sur, cuando el 7.º de Caballería intentaba desarmar a un grupo de indios lakota. El regimiento es famoso porque perdió la mayor parte de sus efectivos el 25 de junio de 1876, en la batalla de Little Big Horn; la derrota del general Custer.  Tras la Guerra Civil norteamericana, el gobierno inició la expulsión de los nativos americanos de sus territorios (1865). Constituido el 28 de julio de 1866, el 7º Regimiento de Caballería se organizó formalmente el 21 de septiembre en Kansas. Su misión específica era proteger las fronteras y evitar que los nativos masacraran a los buscadores de oro y a las caravanas de colonos.

[9] 1 año tiene 365 días; 1 día tiene 24 horas; 1 hora tiene 3600 segundos; así pues, 365 x 24 x 3600 = 31.536.000 segundos.

[11] The World Factbook, también conocida como el CIA World Factbook,​ es una publicación anual de la Agencia Central de Inteligencia (CIA)​ de los Estados Unidos con información básica tipo almanaque acerca de diversos países del mundo. La copia de la versión oficial está disponible en el Servicio Nacional de Información Técnica y en la Oficina de Imprenta del Gobierno. The Factbook está disponible en forma de página web -https://www.cia.gov/the-world-factbook/-, y se actualiza parcialmente cada semana. También está disponible para su descarga para uso fuera de línea. Proporciona un resumen de dos o tres páginas de los datos de demografía, geografía, comunicaciones, gobierno, la economía y militar de 267 entidades, incluidos en ellos los países reconocidos por Estados Unidos, los territorios dependientes y otras áreas en el mundo.

[12] Inmovilidad en lo moral y lo físico

[13] Barrios marginales; asentamientos urbanos informales. Dharavi, en los suburbios de Mumbai (India), la tercera ciudad más grande del mundo es un slum con una población entre 600,000 y un millón de personas.

[14] Cristina García Rodero (Puertollano, 1949) ha sido la primera española en trabajar para la prestigiosa agencia fotoperiodística Magnum. Ha sido premiada con el World Press Photo 1993, el Premio Nacional de Fotografía 1996, el Fotopres "la Caixa" 1997, el PhotoEspaña 2000 y 2017, el Godó de Fotoperiodismo 2000, y las medallas de oro al Mérito de las Bellas Artes 2005 y de Castilla-La Mancha 2016.

[15] "Tierra de sueños" muestra sin complejos la singularidad y asimetría del mundo rural en la India, con especial atención al rol que ocupan las mujeres.

[16] Estado de la República de la India ubicado al sureste del país, limitando al norte con Telangana y Orissa, al este con la bahía de Bengala (océano Índico), al sur con Tamil Nadu y al oeste con Karnataka. Con 160 205 km² es el octavo estado más extenso, por detrás de Rajastán, Madhya Pradesh, Maharastra, Uttar Pradesh, Jammu y Cachemira, Guyarat y Karnataka. Es el nexo de unión entre el sur y el norte de la India. Se le considera el ‘cuenco de arroz’ del país. Lo cruzan los ríos Godavari y Krishna. Eminentemente agrícola, el arroz, la caña de azúcar, el algodón y el tabaco son los principales cultivos. Andhra Pradesh es el segundo estado de la India donde se registran más crímenes contra las mujeres. Son especialmente numerosos los casos de acoso sexual y de violencia de género, tanto por parte de los maridos como de familiares. Es una zona muy tradicional y se rige por un sistema patriarcal en el que los hombres intentan coartar la libertad y autonomía de las mujeres.

[18] Revista médica general internacional e independiente, de periodicidad semanal, fundada en 1823 por el cirujano Thomas Wakley. Desde su primer número (5 de octubre de 1823), la revista se ha esforzado para que la medicina pueda servir y transformar la sociedad e impactar positivamente en la vida de las personas. The Lancet aplica el conocimiento científico para mejorar la salud y promover el progreso humano. En nuestros números semanales y en la web publica parte de la mejor ciencia de los mejores científicos de todo el mundo, lo que proporciona un alcance global y un impacto en la salud sin precedentes.

[20] entre militares regulares, combatientes de las milicias prorrusas, y contratistas de empresas militares privadas como el Grupo Wagner.

[21] Un año luz es una unidad de longitud utilizada para medir distancias astronómicas que equivale aproximadamente a 9,46 × 1012 km (92460.7301472.580,8 km)

[23] Cádiz fue fundada en 1100 A.C. por comerciantes fenicios de Tiros, vieja ciudad fenicia situada en el sur del actual Líbano, llamándola Gadir, (reducto, fortaleza). En Gadir construyeron un puerto y levantaron un templo donde supuestamente guardaban las cenizas de Hércules.

[24] Fenómeno demográfico ocurrido durante el período comprendido, en España, entre 1955 y 1975. No debe confundirse con el concepto de explosión demográfica, que se refiere a una fase de la transición demográfica caracterizada por incremento de la población con la disminución de la mortalidad como causa principal.

[25] Sucesión de problemas económicos causados por un envejecimiento general de la población, al no existir tasa de reemplazo, y el consiguiente aumento en la tasa de mortalidad. Esto conlleva múltiples problemas económicos. Por un lado, exige un mayor gasto público para responder al aumento de la demanda de los sistemas sanitarios y de las pensiones y, por el otro, el descenso de la población joven también causa una escasez de mano de obra.

[26] En agosto de 2008, la Agencia Tributaria había pagado algo más de 1.000 millones de euros. Al menos, 400.000   familias que se beneficiaron del cheque-bebé entre julio de 2007 y junio de 2008. El Ministerio de Trabajo esperaban un gasto de algo más de 1.200 millones al año. No alcanzó objetivos ni el primer año.